- Detrás del nombre, Global Smart Grid Innovation hub, palpita un ecosistema de innovación único en el mundo. Concebido como un centro de I+D+i abierto, en las instalaciones de Iberdrola en Larraskitu conviven técnicos de la eléctrica vasca, personal de sus proveedores, universidades, centros tecnológicos y startups que desarrollan estrategias y productos de cara al futuro. El desarrollo de las redes eléctricas inteligentes es una de las claves de la transición energética y toda la actividad del hub orbita alrededor de ese concepto.
Algunas actuaciones son tangibles. El desarrollo de contadores inteligentes o de sistemas de control de subestaciones eléctricas que eviten caídas del suministro y fallos tan graves como los que dejaron sin servicio a los usuarios de WhatsApp, Instagram y Facebook el pasado lunes. Ingeteam, Ormazabal, Schnneider o Ziv trabajan en esos campos junto a Iberdrola.
Dentro de esas sinergias, en el hub de redes eléctricas de Iberdrola se ha diseñado un prototipo de robot para detectar fallos en las subestaciones de modo que el personal de reparación acuda a las instalaciones conociendo de antemano cuál es el problema. La ciberseguridad, la protección de las redes inteligentes, es otro de los campos claves de actividad. El análisis y la gestión de los datos es otro de los grandes frentes del centro, la parte más compleja de bajar a tierra, pero la clave de todo. Ahí entra en juego las matemáticas -junto a la inteligencia artificial uno de los idiomas comunes del centro- y el diseño de algoritmos que permitan cribar los datos que pueden ayudar a avanzar hacia un consumo y suministro de electricidad más eficiente. Más allá de la teoría, el centro ya ha gestado 120 proyectos con una inversión de 110 millones de euros.