Las dos semanas previas de suspensión de la producción en la cadena de montaje de la factoría de Mercedes Benz en Gasteiz se han aprovechado por parte de la multinacional para ir rematando y dando salida a parte de los más de 5.000 monovolúmenes que tenía pendientes de finalizar por la falta de alguna de las piezas.

La ausencia de actividad no es total ya que hay grupos de operarios que siguen acudiendo a la planta de la calle Las Arenas para ensamblar en los distintos vehículos piezas como botoneras, componentes del aire acondicionado o módulos de sonido, entre otros, que restaban por incorporar a los vehículos y poderlos dar por ensamblados. En ningún caso se trata de los codiciados semiconductores o chips electrónicos asiáticos, que mantienen en el dique seco la actividad desde hace siete días.

Según ha podido confirmar DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA los operarios mantienen el ritmo de trabajo a tres turnos y se están recuperando del orden de medio millar de unidades diarias. "Desde que se concretó la parada de producción la empresa está priorizando la salida de estos coches estacionados en la campa", reconocen las fuentes sindicales consultadas por DNA.

Los problemas para abastecerse de todas las piezas necesarias para ensamblar las unidades de los modelos Vito y Clase V producidos en Gasteiz han llevado durante los últimos meses a saturar de vehículos la gran campa anexa a las instalaciones de la calle Las Arenas. Por este motivo y ante el creciente problema con los chips asiáticos, se optó por trasladar parte de esos incompletos vehículos a una gran campa situada en la localidad de Araia.

Al concretarse la primera semana de suspensión de la producción, del 31 de agosto al e de septiembre, la estimación de vehículos pendientes de alguna pieza se cifraba en las 4.400 unidades. Durante esos primeros cinco días con la actividad cancelada, la previsión de trabajar a tres turnos apuntaba al hecho de poder dar por finalizados unos 2.000 monovolúmenes. Con la confirmación del segundo parón semanal en la producción durante la semana en curso y el ritmo de trabajo de los operarios, la cantidad de vehículos recuperados puede llegar a las 4.000 unidades. De esta manera, se vaciarían notablemente esas campas de Araia y Gasteiz donde se amontonan los diferentes modelos de Clase V y Vito.

Los monovolúmenes que quedan totalmente ensamblados pasan ya a la red comercial de concesionarios y están en condiciones de ser entregados a su propietario final.

5.000

La falta de componentes electrónicos y otras piezas no ha hecho posible que estén ensamblados y están en campas fuera de la factoría.

2.000

Con el trabajo a tres turnos se posibilita dar por terminadas cerca de 450 unidades cada jornada.