- Las dos almas del Gobierno español siguen chocando en los pasillos de La Moncloa cuando se trata de temas económicos y, sobre todo, en todo lo relacionado con el ámbito laboral. No hizo falta ayer una contestación desde el ala socialista, la hemeroteca ha dejado varios cruces de palabras entre ministros de Podemos y del PSOE sobre la intensidad de la reforma laboral. Y la formación morada aumentó ayer la apuesta con un órdago que tendrá eco en la esquina de la patronal y probablemente también en el reforzado despacho de la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño.
Justo por debajo, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, aseguro ayer que la reforma laboral va a propiciar una “auténtica revolución” en el mercado de trabajo del país, ya que nunca antes se había abordado su principal problema: la precariedad y la temporalidad.
Así lo señaló a su llegada a la Semana Negra de Gijón hasta donde se desplazaron decenas de personas de diferentes colectivos para protestar o mostrar sus preocupaciones en materia laboral.
Díaz no quiso desvelar el contenido de las mesas de diálogo social, pero avanzó que se va a propiciar una “auténtica revolución” en el mercado de trabajo al abordar por primera vez la temporalidad y precariedad. En materia de salario mínimo interprofesional, consideró que no se puede hablar de una recuperación social y justa si no se sube el salario mínimo a los más débiles, ya que hay 1,5 millones de personas asalariadas fuera de convenio.