- La banca española tenía concedidas 1,38 millones de moratorias de créditos hipotecarios y de consumo a sus clientes a finales de enero, con un saldo total pendiente de amortización que supera los 54.000 millones de euros, según los datos actualizados ayer por el Banco de España.
En esas cifras se incluyen tanto las moratorias legislativas, es decir, las de aquellos afectados por la crisis del coronavirus que cumplían los requisitos fijados por el Gobierno, como las moratorias sectoriales en las que la propia banca flexibilizó los criterios con la idea de que más personas pudieran beneficiarse.
En el caso de la medida legislativa para librar del pago de las hipotecas, a cierre de enero las entidades tenían concedidas 221.932 moratorias, un 84,9% de las 261.370 solicitadas, con un saldo vivo de 19.955 millones.
Cabe recordar que esas moratorias podían solicitarse inicialmente hasta finales de septiembre, pero ahora el Gobierno ha decidido abrir una nueva ventana para que esta medida de ayuda se pueda pedir hasta finales de marzo.
Por otra parte, habían recibido 411.015 peticiones de moratorias legislativas de préstamos de consumo y se habían otorgado a 362.007 personas, un 88,1%, con un saldo pendiente de amortización de 2.679 millones.
A estas moratorias legislativas tanto de hipotecas como de consumo hay que sumar las solicitudes de moratorias sectoriales, acordadas voluntariamente por las entidades, y que ascendían a 820.551, de las que se han concedido 796.125 a cierre de enero, un 97%, con un total de 31.480 millones pendientes de amortizar.
Para los tres tipos de moratoria, la gran mayoría de deudores beneficiarios y avalistas (por encima del 70%) son asalariados. Respecto a los trabajadores autónomos, el desglose por ramas de actividad muestra de nuevo que, para los tres tipos de moratoria, los principales sectores beneficiarios son comercio, hostelería y otros servicios, seguidos a cierta distancia de actividades profesionales, científicas y técnicas, transporte y construcción.
En conjunto, estos sectores de actividad representan casi el 80% del total de moratorias para autónomos a las que se ha dado curso hasta la fecha.