- El hundimiento de la economía por la pandemia, y la aceleración de la digitalización de sus clientes, han dejado caduco el modelo de grandes plantillas y oficinas bancarias. Desde 2008 se han cerrado el 49,34% de las sucursales y echado al 37% de los trabajadores en ocho de los 12 bancos principales. Según el diario El País, detrás de estos movimientos están los tipos negativos, la competencia de las grandes tecnológicas y la presión de los supervisores. El giro tecnológico y digital se acelera, pero las entidades tendrán que transformarse con cuidado para no perder a su clientela mayor, la que más ingresos genera, ni llegar a la exclusión financiera por la brecha digital, afirma El País.