- El primer buque electrico-híbrido construido en su totalidad en Euskadi está amarrado en el puerto de Pasaia, hasta donde ha llegado desde el de Orio, donde el Ortze superó su proceso de conversión a un barco con cero emisiones. Cuando salga a la mar funcionará como un aula flotante para el alumnado del IES Náutico Pesquero Blas de Lezo, un aula en la que podrán practicar con un motor híbrido que, hasta la fecha, conocían solo sobre el papel.
El grupo Ingeteam ha sido el encargado de liderar este proyecto que echó a andar allá por 2017 y que, a trazo grueso, ha consistido en instalar un nuevo sistema de propulsión híbrido que permite que navegue entre tres y cuatro horas con el motor eléctrico y con cero emisiones.
Juanjo Varela, responsable del proyecto, incide en la complejidad técnica del mismo, dificultad que ha alcanzado incluso al montaje del motor en el barco, que también antes de su nueva vida funcionaba como buque- escuela. “Primero se han tenido que simular todos los componentes para dimensionarlos muy bien y después fabricarlos y probarlos a nivel individual, cada empresa el suyo. Pero uno de los mayores retos ha sido instalar toda esta tecnología en un barco relativamente pequeño, de 20 metros de eslora”, explica.
La adaptación del Ortze supone dar un paso más en una apuesta de futuro, la de lograr que sean cada vez más los buques que operan en las proximidades de la costa con cero emisiones en las entradas y salidas de los puertos y en entornos protegidos. Queda por delante, en el caso de buque amarrado en Pasaia, superar el periodo de pruebas oficiales previo a la consecución del permiso de navegación y operación como buque- escuela.
“Es el primer buque eléctrico diseñado y desarrollado en Euskadi. Es la primera referencia aquí y a nivel estatal. Incluso a nivel internacional es de los pocos buques que dispone de esta tecnología”, explica Varela.
Dotar al Ortze de este motor pionero ha servido para reformar también el puente y la sala de máquinas. El buque navega con cero emisiones y un “nivel de ruido acústico muy bajo” gracias a “un sistema de almacenamiento por baterías muy grande situado a bordo”, lo que le dota de una autonomía de hasta cuatro horas a una velocidad de cinco o seis nudos, unas doce millas de autonomía que son suficientes para las misiones programadas que se efectuaran “cerca de la costa”. En el caso de que fuera necesario prolongar el tiempo de navegación su sistema híbrido le permitiría arrancar gracias a su generador diésel.
Los alumnos de la Escuela Profesional Blas de Lezo serán los principales usuarios de un buque donde realizarán “prácticas de navegación, de artes de pesca o de buceo”, estableciendo contacto “con tecnologías punteras”. Además, también Azti aprovechará las virtudes del Ortze para realizar investigaciones y campañas de monitorización medioambiental por la costa.
“Pretendemos que sea el ejemplo para crear el ecosistema necesario y la gente se conciencie y se forme para explotar esta tecnología cara al futuro”, abunda Varela, que recuerda que a nivel internacional hay países que han hecho una apuesta clara en este sentido desde hace ya un tiempo. “No hemos querido hacer un buque solo eléctrico para no impedir que pueda realizar otras misiones mar adentro”, puntualiza.
El director del IES Blas de Lezo, Mikel Arrieta, recuerda que la decisión de tener un barco vinculado al centro se adoptó en 1996, utilizándolo para realizar las prácticas. El grupo Ingeteam contactó con Blas de Lezo para explicar su proyecto y el centro no dudó en poner a su disposición el barco.
“Ahora tenemos todos los equipos funcionando y estamos a la espera de que la Capitanía Marítima nos conceda los permisos para navegar y utilizar el barco con los alumnos para hacer distintas maniobras y navegaciones con las nuevas características de propulsión”, señala. Además, tendrá una gran utilidad para el alumnado de los ciclos de mantenimiento de máquinas, que podrá hacer prácticas con esta innovadora tecnología.
Contar con el renovado Ortze permite que los cerca de 200 alumnos que cursan algunos de los cinco ciclos formativos que oferta Blas de Lezo adquieran conocimientos prácticos en una tecnología que se perfila vital a futuro. “Esto nos pone en el foco de la Formación Profesional Marítima a nivel estatal. Lo tenemos aquí y asociado a la escuela, aunque el barco sea propiedad del Gobierno Vasco. Nos abre el campo tanto en la Formación Profesional como en la formación para personas desocupadas”, concluye Arrieta.
El barco. Ingeteam desarrolló los convertidores de electrónica de potencia y los sistemas control que propulsan el buque e Indar, también del grupo Ingeteam, construyó el nuevo motor de imanes permanentes de alta eficiencia energética y baja emisión de ruido acústico.
100% vasco. En el proyecto de I+D han participado SKV-Skandiaverken, Ormazabal, Lasa Naval, El Foro Marítimo Vasco, la UPV/EHU, la Estación Marina de Plentzia, Mondragon Unibertsitatea y Azti. El Gobierno Vasco ha impulsado el proyecto a través de distintas líneas, como Hazitek.