Madrid - Los taxistas de Madrid se unieron ayer a la huelga indefinida que sus compañeros de Barcelona empezaron el viernes, mientras el Gobierno regional madrileño y la Generalitat buscan soluciones tras ver rechazadas sus propuestas para regular la actividad de los vehículos de alquiler con conductor (VTC).

Las asociaciones de Madrid se reunieron ayer por la tarde con la consejera madrileña de Transportes, Rosalía Gonzalo, horas antes de que los taxistas de Barcelona mantengan hoy un nuevo encuentro con responsables de la Generalitat. Antes de la reunión de Madrid, el presidente de Fedetaxi, Miguel Ángel Leal, acusó al Gobierno regional de intentar “pasar la pelota” al Ayuntamiento de la capital. El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, había planteado a los taxistas que el tiempo de precontratación de los servicios de VTC, uno de los puntos más sensibles, sea fijado por los ayuntamientos. Los taxistas, no obstante, quieren que la precontratación se imponga por ley y no mediante ordenanzas municipales.

Cientos de taxistas se manifestaron ayer desde la Puerta del Sol hasta la Plaza de Cibeles, en Madrid. Exceltur, la organización que agrupa a las grandes empresas del sector turístico, pidió a los taxistas que suspendan la huelga, con motivo de la inauguración mañana de Fitur.

Los taxistas de Barcelona, en huelga indefinida desde el viernes, endurecieron sus protestas antes de verse hoy con la Generalitat, que preveía aprobar el decreto sobre los VTC en un mes, aunque ahora baraja aumentar ese plazo. Además de mantener bloqueado por cuarto día el tramo central de la Gran Vía de Barcelona, unos 2.000 taxistas ataviados con chalecos amarillos llevaron por la mañana sus protestas al centro de Barcelona, a la Ronda Litoral y al Puerto, con lo que colapsaron la circulación e incluso se enfrentaron a las fuerzas de seguridad. Tres agentes de los Mossos resultaron heridos de diversa consideración durante los enfrentamientos. También hubo otro herido, en este caso un guardia civil, al tratar de impedir que los taxistas accedieran al Puerto de Barcelona. Los taxistas, además, causaron daños a dos vehículos VTC. La patronal Unauto cifró en unos 80 los vehículos VTC que han resultado “dañados” por taxistas desde el pasado viernes. Por su parte, conductores de vehículos VTC bloquearon por la mañana parte de la Diagonal.

El consejero de Territorio de la Generalitat, Damià Calvet, tras un encuentro con representantes de las empresas de VTC, insistió ayer en defender que los servicios se contraten con una antelación mínima de quince minutos. No obstante, garantizó que el decreto dará cobertura legal al Área Metropolitana de Barcelona para que pueda establecer un tiempo mayor mediante un reglamento. El consejero exigió de nuevo a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que “asuma sus responsabilidades”. La Autoridad Catalana de la Competencia volvió a advertir de que la obligación de precontratar el servicio con una anticipación determinada supone “la introducción de ineficiencias artificiales e injustificadas”. - Efe