MADRID - Las empresas industriales españolas se quejan habitualmente de que soportan unos costes energéticos, en general, y eléctricos, en particular, más altos que sus principales competidoras francesas y alemanas. Pues esto puede cambiar en el futuro ya que el Estado español podría tener un precio de la electricidad más competitivo que el francés gracias a que dispone de un mix de generación eléctrica, -hidráulica, eólica, solar, nuclear, gas, etc- más adecuado que Francia. Eso sí, siempre y cuando España cuente con una fiscalidad correcta y “sin distorsiones” según las conclusiones del informe de la Comisión de Expertos sobre Transición Energética.

En el horizonte de 2030, en el proceso de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, España en base a contar con un favorable mix de generación eléctrica basado en las centrales de ciclo combinado a gas natural y en las energías renovables, -fotovoltaica, eólica, hidráulica etc-, tendría un precio del mercado mayorista eléctrico, el conocido como pool, “más barato” debido a la mayor presencia de las energías renovables, por supuesto, siempre y cuando lo permita la fiscalidad que fija la Administración.

Esos precios más baratos de la luz permitirían, adicionalmente, al Estado español convertirse en un exportador neto de electricidad al país galo, con independencia del nivel de interconexión eléctrica, hoy todavía insuficiente, existente entre España y Francia.

El presidente de la Comisión de Expertos, Jorge Sanz, se ratifica, según Europa Press, en que el escenario de 2030 hará que España cuente con un mix de generación eléctrica “más favorable” que Francia, -un país hoy totalmente dependiente de la energía nuclear-, a precios bajos gracias a la mayor presencia de las renovables citando, por ejemplo, el mayor potencial solar del territorio español.

“En España caben más renovables que en Francia, ya que tenemos más sol, por ejemplo, que entra en el pool más barato”, destaca Jorge Sanz.

Naturalmente, según reitera el técnico, ese escenario de precios eléctricos más bajos que Francia sólo será posible “si lo permite la fiscalidad”. Y en ese contexto, el Estado español podría ser un exportador de electricidad al país galo.

Este nuevo escenario también pueda plantear algún problema pues Sanz advierte de que esa citada capacidad exportadora a Francia podría tener el riesgo de elevar los precios de la electricidad y las emisiones en España con el aumento de la interconexiones eléctricas con el país galo y se abriría el debate de quién cargaría con el peso de financiarlas. - DNA