gasteiz - El Gobierno Vasco confirmó ayer que cerrará el ejercicio 2017 con superávit y que dispondrá de más dinero para invertir y adelantar amortizaciones de deuda. El buen ejercicio fiscal, que ha permitido superar en 1.000 millones la previsión de recaudación, impulsará a Euskadi fuera del pozo del déficit, si bien todavía se desconoce el volumen del excedente.

El superávit contabilizado hasta noviembre es de 713 millones de euros, un 0,99% del PIB vasco, el porcentaje más alto del Estado. Según informó ayer el Ministerio de Hacienda, a falta de contabilizar el último mes del año, diez comunidades se mantienen fuera de la zona de números rojos y se registra un superávit conjunto del 0,11%.

En el cierre final del año que realizará el Ministerio de Hacienda con los datos de gasto de diciembre se contabilizará el acuerdo para la actualización del Cupo suscrito en junio con el Estado. Hay dudas sobre cómo computará Madrid ese dinero, que técnicamente corresponde a diez ejercicios contables. Además, el Gobierno Vasco ya ha anticipado gastos con esos fondos, de modo que lo más probable es que su aportación no sea muy destacada. Además, el Gobierno vasco adelantó a diciembre actuaciones inicialmente previstas para este año. De forma que aunque ya se sabe que habrá superávit y aunque la cifra definitiva que se dará a conocer las próximas semanas sea muy llamativa, no se podrá invertir todo el excedente, porque además la rigidez de la regla de gasto bloqueará parte de esos recursos.

A falta de conocer el dato final, fuentes del Departamento vasco de Hacienda insistieron ayer en que el remanente, el dinero que se podrá dedicar a inversión, rondará los 150 millones de euros. A esa cantidad habría que sumar los 160 millones que se adelantaron en diciembre para diversas actuaciones. También está previsto dedicar 280 millones a amortizar deuda y adelantar de este modo la eliminación de la grasa acumulada durante la crisis en las arterias de la administración vasca, la que impide que el gasto avance con total fluidez. Será otra batalla ganada, aunque la deuda seguirá contaminando los Presupuestos vascos hasta 2020. El consejero de Hacienda y Economía ya adelantó que si este año es tan favorable como se intuye las Cuentas Públicas de 2019 tendrán un carácter más expansivo. - A.D.M.