BILBAO. Además, ha insistido en la necesidad de "que se cumpla el Estatuto de Gernika" para que el Gobierno vasco pueda participar de "forma más activa en garantizar el futuro de las pensiones".
Durante la inauguración de la jornada "Presente y Futuro de los sistemas de pensiones, el papel de los tres pilares de la Seguridad Social", celebrada en Bilbao por la Federación de EPSVs el consejero se ha mostrado convencido de la imposibilidad de abordar el futuro de la previsión social complementaria "sin tener en cuenta el del sistema público".
En su opinión, Euskadi se ha convertido en un referente dentro del Estado en lo relativo a Previsión Social Complementaria (PSC), aunque "no así en la esfera internacional".
Entre los aspectos positivos existentes en el País Vasco ha citado la regulación propia "consolidada", la capacidad para definir los incentivos fiscales, el desarrollo de "una experiencia significativa en los sistemas de empleo" y el "consenso básico" existente "entre todas las partes interesadas", de que "siendo el primer pilar público, el elemento fundamental hay una necesidad de la generalización de la previsión complementaria a través del segundo pilar".
También se ha referido a "las dificultades" en la fase de desarrollo, como "un gran desconocimiento entre la ciudadanía" sobre la finalidad y el funcionamiento de la Previsión Social Complementaria, que, "a menudo, se asocia a un producto financiero con favorable tratamiento fiscal" o la concentración de la negociación colectiva en salario y jornada que, "junto con la dificultad de mejoras retributivas, dificultan el desarrollo del sistema de empleo".
Ha incluido, entre las trabas, a la "limitada" capacidad de ahorro de amplios colectivos de rentas medias y bajas, "y en especial de los más jóvenes" por el "gran impacto de la crisis", así como que los incentivos fiscales "no han contribuido de la forma que hubiera sido deseable a la generalización del segundo pilar, que es el objetivo central".
A su juicio, "las posibles estrategias de salida para recobrar el impulso" requerirá de "mucho diálogo y trabajo conjunto como paso previo a su consideración por el Consejo Vasco de la Previsión Social".
Pedro Azpiazu ha aludido a la aprobación, por parte del Gobierno vasco, del Plan de Previsión Social 2006-2014, que "barajaba, como aspiración, que la Previsión Social Complementaria" llegara a "cubrir el 20% de los salarios finales", de manera que los ciudadanos vascos "dispusieran de una tasa de sustitución de rentas que le permitiera mantener su nivel de vida".
Un objetivo así supone, según sus cálculos, una aportación del 6% del salario anual a lo largo de la vida laboral, por lo que "no sorprende" que se esté "lejos de poder hacer realidad ese desideratum, excepto para algún colectivo reducido de población asalariada".
Además, ha apuntado que aquella referencia "se insertaba en un contexto de cobertura del sistema público que ha cambiado radicalmente", ya que "la crisis económica, la contención salarial, el aumento sostenido del número de pensionistas y el efecto sustitución de las altas por las bajas, conducen a un déficit persistente". "En el año 2018 vamos a asistir al fin de la hucha de las pensiones", ha advertido.
Según ha censurado, "un fondo de reserva invertido en deuda pública, si se consolida con el Estado, significa simplemente menos deuda pública total y nada más". Además, ha apuntado que "el volumen que alcanza el fondo" es "un límite que no se puede traspasar". "De hecho, hoy el Estado tiene que prestarle a la Seguridad Social para cubrir el déficit", ha añadido.
En el marco del "significado y alcance de las reformas del sistema acometidas en 2011 y en 2013", ha asegurado que "la introducción del factor de sostenibilidad y del índice de revalorización supone un modelo que conduce a la eliminación de los déficit estructurales, y de que informa de lo que el sistema puede dar de sí, habida cuenta de la demografía y de la evolución de la economía".
A su juicio, "no basta con decir que sin sostenibilidad no hay suficiencia", sobre todo cuando, "como consecuencia de los procesos de ajuste, la suficiencia sufre de manera clara", como en la actualidad.
Para el consejero de Hacienda y Economía, "no hay razones para desviarse de manera estructural del modelo de los tres pilares que siempre hemos tenido en mente y del peso que debe jugar cada uno de ellos". "Eso sí, nos enfrentamos a un complejo proceso de ajuste y transición que va a requerir un gran esfuerzo de colaboración por parte de toda la sociedad", ha añadido.
Azpiazu ha recomendado a los ciudadanos que "se informe y escudriñen todas las fuentes" para ver "cuáles son los costes y rentabilidades de los distintos planes, y comprenda las indudables ventajas que reportan los planes de empleo en términos de coste y rentabilidad".
También ha sugerido a las empresas "que consideren el indudable valor que en el momento actual tiene la previsión social de empleo para la sociedad y para la estabilidad de los propios proyectos empresariales". Por otra parte, se ha dirigido a "los representantes de la clase trabajadora" para que entiendan que "se precisa su colaboración activa y su esfuerzo económico para consolidar los planes de empleo". "Todos debemos pensar qué podemos aportar para resolver un problema de toda la sociedad", ha manifestado.
ESCENARIO DIFICIL
Azpiazu se ha dirigido a los agentes del sector para advertirles de que "nos enfrentamos a un escenario difícil, en el que tendremos que ser más eficientes, porque el esfuerzo de generalización es grande, por más que el proceso venga favorecido por una implantación gradual". Mientras, ha instado "a toda la sociedad" a que exija a los poderes públicos "una actitud activa, comprometida y transparente".
"Las administraciones, en el ámbito de nuestras respectivas responsabilidades, debemos responder diciendo cómo pensamos gestionar la transición demográfica, cómo vamos a repartir los esfuerzos y cuál es el modelo que perseguimos", ha dicho.
Según el responsable vasco de Hacienda y Economía, por su parte, el Estado, "que es el competente en la regulación del sistema público, no puede permanecer a la espera escudándose en una hucha fallida y en unos índices de sostenibilidad mientras la suficiencia se deteriora".
Además, ha aclarado que el Gobierno Vasco "persigue que se cumpla el Estatuto de Gernika", y "con ello, poder participar de forma mejor y más activa en garantizar el futuro de las pensiones". "Creo que nos avala una acción política que ya ha demostrado su compromiso en el mbito de la prestación social complementaria al que somos conscientes de que debemos dar un nuevo impulso", ha concluido.