Gasteiz - Los vascos son los empresarios del Estado que menos trabas encuentran en el marco fiscal para desarrollar su actividad. Solo un 22,8% de las patrones de la CAV considera que la fiscalidad es “desfavorable” para sus intereses, un porcentaje que contrasta con el casi 31% que se registra en el conjunto del Estado y sobre todo con el dato de La Rioja, que con un 42,2% tiene los empresarios más insatisfechos con su regimen tributario.
En el otro extremo, el 75% de los responsables de empresa de Euskadi estima que la fiscalidad no tiene impacto en su actividad productiva, lo que supone también el porcentaje más elevado. Son datos extraídos del Modulo de Opinión Empresarial del Instituto Nacional de Estadística referido a 2016, que también sitúa a Euskadi a la cabeza de la percepción de un entorno macroeconómico y un nivel de morosidad de los clientes más favorable para el desarrollo empresarial
La CAV pierde impulso en otras variables analizadas: eficiencia del mercado de trabajo, infraestructuras o disponibilidad de financiación. Sin embargo, en líneas generales, el clima de confianza es más elevado en Euskadi que en el conjunto del Estado. Las expectativas de negocio son mejores a pesar de la incertidumbre que rodea sobre todo a las empresas más volcadas en el exterior, que es uno de los rasgos principales de las empresas vascas.
La percepción mayoritariamente positiva del marco fiscal en Euskadi coincide en el tiempo con el debate abierto en torno a una posible reforma tributaria de las diputaciones forales. Tecnicos de las haciendas vascas están analizando en estos momentos el modelo actual, que entró en vigor en 2014 con el objetivo de evaluar posibles modificaciones. El objetivo es terminar con la fase de análisis en este primer semestre del año y a partir de ahí tomar decisiones.
Oficialmente Confebask reclama una rebaja de la presión fiscal, pero a tenor de la encuesta elaborada por el INE, los empresarios no ven en general la fiscalidad como una amenaza. No se sienten cómodos del todo, porque solo el 2% estiman que el andiamaje tributario vasco le favorece, aunque tampoco es una de sus mayores preocupaciones.
Lo más llamativo de la mejor percepción de la fiscalidad por parte de las compañías vascas que las del resto del Estado es que el tipo general del Impuesto de Sociedades de la CAV si sitúa en el 28% frente al 25% del territorio común. Es el tipo al que tributan los beneficios de las grandes empresas, mientras que las pymes bajan hasta el 24% en el caso vasco.
Además, hay cuatro grandes grupos de deducciones que permiten reducir el porcentaje. Son incentivos a la creación de empleo, a los procesos de innovación, a la inversión en mejoras productivas y a las actuaciones medioambientales. Esas herramientas de estímulo de la economía suavizan el impacto fiscal en las cuentas de resultados y favorecen la actividad económica
El modulo de confianza empresarial del INE revela asimismo un descenso en las opiniones contrarias al marco fiscal a partir de la aprobación de la última reforma tributaria en Euskadi. Un 40% de las compañías vascas percibía la fiscalidad como un aspecto negativo en 2013 y el porcentaje bajó hasta el 34% en 2014, el año en el que entraron en vigor las normas actuales. En 2015 se dio un salto importante y se redujeron a la mitad (17%) las opiniones contrarias. El año pasado se registro un avance hasta casi el 23%, problamente porque en ese ejercicio fiscal hubo más empresas con beneficios que tuvieron que retratarse ante la Hacienda foral.
Opinión desfavorable. Casi un 31% de las empresas españolas ve negativo el marco fiscal, en Euskadi solo el 22,8. %
Andalucía36,19
Aragón30,52
Asturias32,57
Baleares33,93
Canarias28,80
Cantabria32,10
Castilla y León37,87
Catalunya26,75
C. Valenciana26,76
Extremadura29,15
Galicia36,15
Madrid27,01
Murcia30,58
Nafarroa28,74
País Vasco22,81
Rioja42,20
Media Estado30,92