gasteiz - La dirección de la planta de Mercedes Benz en Gasteiz y los sindicatos UGT, Ekintza y PIM alcanzaron ayer un preacuerdo para la firma del convenio que en este momento sería de eficacia limitada, al no contar con el respaldo de la mayoría compuesta por CCOO, ELA -que ostenta acualmente la presidencia del comité-, LAB y ESK. El acuerdo se cerró ayer tras un intercambio de propuestas y ahora deberá someterse a referéndum entre la plantilla. Según explicó UGT, la firma del acuerdo debería producirse antes de fin de año y, de no aprobarse por los trabajadores, “significaría un punto y final y las pretensiones de la dirección de la compañía regresarían a las de inicio en el mes de enero”.
El preacuerdo contempla una subida salarial fija del 1,8% para cada uno de los cinco años de vigencia del convenio (2016-2020), así como “una paga de reconocimiento del esfuerzo realizado” de 350 euros a la firma del convenio y una paga variable “que en el mejor de los casos podría ascender a 1.500 euros”. Además, prevé 1.000 contratos indefinidos, 500 de ellos a la firma del convenio y 125 por año hasta 2020 y el compromiso de realizar 200 jubilaciones en ese periodo. Por otra parte, incluye un modelo de trabajo nocturno “con contratación ad hoc” que “evita la doble novena hora y los sábados, que garantizará el tercer turno desde las 120.000 unidades y absorberá la flexibilidad”, además de la “garantía de trabajar de lunes a viernes ocho horas para el personal desligado del turno nocturno”.
Pese a que UGT es la primera fuerza sindical en el comité de Mercedes, perdió la presidencia en mayo en favor de ELA después de que CCOO, LAB, ESK y ELA unieran fuerzas cuestionando la estrategia de negociación del convenio de UGT que, denunciaron, discrepaba de la opinión mayoritaria del comité. De hecho, tras este episodio la plantilla de Mercedes Benz avaló mayoritariamente en dos asambleas la decisión de negociar un convenio de eficacia general, es decir, con el concurso de la mayoría del comité. ELA, CCOO, LAB y ESK tienen 14 de los 27 representantes del comité, mientras que UGT tiene 9 y es la primera fuerza sindical en la planta.
críticas desde la mayoría Ayer, desde CCOO se recordaba que en la negociación de este preacuerdo no ha formado parte la mayoría del comité de empresa y censuró que viene de una “negociación en minoría”. ELA por su parte consideró en un comunicado que este acuerdo minoritario, que “venía claramente negociado fuera de la mesa de negociación”, permitirá a la empresa “precarizar aún más las condiciones de trabajo”, sobre todo las de las nuevas incorporaciones, en “un año récord de producción”. En este sentido, ELA criticó que la subida salarial acordada del 1,8% es siete décimas inferior a la pactada en el anterior convenio “en plena crisis” y acusó a los sindicatos firmantes de “mercadear con los trabajadores eventuales. Cuando es evidente que gran parte de las 1.900 personas eventuales en la actualidad es estructural y que han sido imprescindibles para el volumen de producción que hemos tenido este año y vamos a tener el año que viene, acuerdan 500 puestos fijos a la firma del acuerdo (300 de los cuales estaban comprometidos en el convenio anterior).
Fuentes de LAB, por su parte, calificaron de “farsa” la negociación, abierta desde una “minoría” y aseguraron que no han querido participar en la mesa de negociación para denunciar esa situación. De hecho, UGT hizo notar la ausencia de LAB de la reunión de ayer subrayando que “los sindicatos UGT, Ekintza y PIM conforman la mayoría de los presentes de la mesa. Es por ello una propuesta lanzada por la mayoría de los presentes en la mesa negociadora”.
Este preacuerdo de la minoría en el comité se someterá a referéndum de los trabajadores en las próximas semanas y antes de que finalice el año. - DNA/Efe