gasteiz - Los sindicatos LAB, Comisiones Obreras y UGT presentarán hoy en Gasteiz una “nueva plataforma de unidad sindical” para la negociación colectiva en el Gobierno Vasco. El alcance de la alianza se limita a la Administración pública y en concreto a Lakua. Además, la primera acción conjunta, una concentración esta mañana a las puertas de la sede central del Ejecutivo, se ciñe a la defensa de las condiciones laborales de los 7.000 funcionarios que trabajan en ese edificio y revertir el “recorte” de derechos que han sufrido en la crisis.
Sin embargo, se abre una puerta a un nuevo escenario de colaboración diferente al que generaban las tradicionales sinergias entre los sindicatos abertzales por una parte y las centrales de ámbito estatal por otra. Ese esquema diferente de cooperación nace sin dar ningún portazo a otras opciones, ya que LAB ha mostrado recientemente su voluntad de recuperar la unidad con ELA. Se amplía por tanto el ámbito de acción sindical, si bien el rechazo de ELA a sumar fuerzas con CCOO y UGT limitará de forma significativa su recorrido.
El alcance de la alianza entre los otros tres grandes sindicatos vascos dependerá de sus resultados. De momento, es significativo el tratamiento que dio cada central a la convocatoria de esta mañana. Haciendo el ejercicio objetivo de medir el ánimo de cada uno de los protagonistas, las sensaciones fueron diversas. Desde el relativo entusiasmo de UGT, que bautizó la iniciativa como una “nueva plataforma de unidad sindical”, a la frialdad de Comisiones que se limitó a informar de una rueda de prensa, sin detallar que también se producirá una concentración conjunta de delegados de las tres centrales. LAB, por su parte, ni siquiera comunicó formalmente su participación en la iniciativa.
Lo cierto es que es en el ámbito de la Función Pública donde más fácil ha sido siempre la suma de fuerzas sindicales, sobre todo a la hora de denunciar los recortes de derechos de los funcionarios, y ahora se transforma en un campo que puede servir de pista de aterrizaje para reforzar lazos al menos entre tres de las grandes organizaciones de Hegoalde.
el precedente del metal No es la primera vez que los sindicatos que dirigen Ainhoa Etxaide, Raúl Arza y Unai Sordo suman fuerzas. Lo hicieron justo ahora tres años cuando LAB, UGT y CCOO convocaron una huelga en el metal vasco y una manifestación que dejó una imagen de unidad sin precedentes en Euskadi. ELA desarrolló una movilización similar en solitario. Eran momentos delicados. El diálogo social vasco había fracasado y no se había podido llegar a un acuerdo entre sindicatos y empresarios para dar respuesta en Euskadi a los efectos de la reforma laboral del PP y evitar que el 7 de julio de aquel 2013 los convenios perdieran la ultraactividad, la vigencia de las condiciones laborales pactadas, en las empresas en las que no se llegara a un acuerdo para renovarlas o mejorarlas.
Los protagonistas de la entente explicarán hoy cuáles son sus objetivos y si es posible que se definan otras áreas de colaboración más allá de la Administración. Con todo, lo más probable es que queden abiertas esa y otras incógnitas, como el papel que puede jugar la alianza en el dialogo social vasco.