Bilbao - El banco creado por las cajas vacas recibió ayer un nuevo espaldarazo. Kutxabank lidera el sistema financiero español en cuanto a solvencia y los test de estrés realizados a los grandes bancos de la eurozona lo han vuelto a poner de manifiesto. También BBVA, la otra entidad vasca analizada, ha obtenido un resultado que refuerza su posición. Laboral Kutxa no ha sido analizada en esta ocasión al no superar los 30.000 millones en activos mínimos exigidos.
Los resultados del test de estrés a la banca europea conocidos ayer no han dejado sorpresas en lo que a las entidades estatales se refiere. El motivo es que hace dos años ya se sometieron a otro examen de estrés, elaborado por Oliver Wyman, y desde entonces las exigencias de provisiones y la prudencia han sido una constante. El sistema español ha estado bajo la lupa. Solo cabía esperar unas notas como las obtenidas.
Pero, aún con todo, el resultado de ambas entidades es más que remarcable. Basta decir que, en contraste, uno de cada cinco bancos europeos analizados en las pruebas de resistencia las ha suspendido. Mientras, las vascas han superado sin problemas todos los supuestos a los que han sido expuestas. Además, a nivel estatal ambas juegan en la liga más exigente y Kutxabank es quien la lidera en solvencia.
Mario Fernández, presidente de Kutxabank, calificó ayer estos resultados de “extraordinariamente positivos”. El banco creado por BBK, Vital y Kutxa hace algo menos de tres años, ya se erigió como la entidad más solvente del sistema financiero español en la revisión de Oliver Wyman tras el rescate financiero a España, en 2012. El nuevo examen, esta vez extendido a la gran banca de la eurozona, ha refrendado esa posición y con ella, la gestión efectuada hasta la fecha, encabezada por el propio Mario Fernández.
El nuevo test, elaborado por el Banco Central Europeo en colaboración con la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), coloca al banco vasco como una de las principales entidades de crédito de la zona euro y eso que en cuanto a tamaño está en la liga media. Pero en fiabilidad está en lo más alto, a la altura de las mejores entidades nórdicas y centroeuropeas, las más prestigiosas. Este empuje al banco vasco llega una semana antes de que entre en vigor el mecanismo único de supervisión, que ha motivado estas nuevas pruebas, y pone en evidencia que el modelo de cajas no era el problema, sino la gestión de algunas de ellas.
Kutxabank es el ejemplo de un banco integrado por cajas de ahorros, las vascas, que en solitario, sin ayudas públicas y sin necesidad de capital ajeno, no solo podría hacer frente a un escenario de recrudecimiento de la crisis sino que además lo afrontaría como la entidad más saneada del Estado y con una holgura envidiable. En la hipótesis más severa planteada como posible en esta prueba el ratio de capital de Kutxabank alcanzaría en 2016 el 11,82%, duplicando la exigencia mínima fijada en el 5,5%.
Precisamente, Fernández puso ayer el énfasis en el carácter social que mantiene la entidad que preside. “Las cajas se han integrado en Kutxabank y somos los mismos, las mismas personas, y lo mismo: un modelo de banca profesional con vocación social” dijo, antes de añadir que “todos los beneficios que se obtienen en esta casa y que se reparten, solo tienen un destino, las obras sociales”. Siendo fiel a esa filosofía, el máximo responsable del banco apuntó que los retos serán constantes en el futuro y que “Kutxabank tendrá que adaptarse a la economía global si quiere mantenerse en los primeros puestos”.
BBVA También el otro banco vasco analizado logró un resultado holgado en el chequeo al que se ha sometido buena parte del sistema financiero europeo. “Las pruebas claramente avalan la fortaleza de BBVA”, indicó el presidente del banco, Francisco González. El banco con sede en Bilbao tendría en ese escenario de crisis severa expuesto para 2016 un ratio de capital del 9%, muy por encima del 5,5% exigido como nivel mínimo. “Lo más importante de estas pruebas es que ofrecen una enorme transparencia de la situación real del sistema financiero europeo”, argumentó González.
El dirigente del banco vasco explicó en sus declaraciones la importancia de la regulación única del sector en la eurozona que entrará en vigor el próximo día 4. “Este ejercicio es fundamental para la Unión Bancaria. A partir de hoy, tendremos un único supervisor para las entidades de la región”, argumentó para añadir que “hoy Europa es más Europa”. En ese sentido, esgrimió que “la solvencia del sistema financiero español es clave para el crecimiento del crédito para empresas y familias”. Según dijo, “vamos a seguir contribuyendo a la recuperación económica de España y también el crecimiento del resto de economías en las que operamos”.
El BCE ha puesto a prueba es la solvencia de los bancos y su capacidad para hacer frente a futuras crisis, pero también la calidad de sus activos. Un examen que ha dejado en evidencia el buen hacer de unos y las carencias de otros.