madrid - El juez Elpidio José Silva logró ayer una vez más demorar su comparecencia ante los tribunales, esta vez por la filtración de los correos de Miguel Blesa, al recusar a la juez que le imputó un delito de revelación de secretos, aunque la magistrada ha rechazado de plano apartarse de esta causa. En esta ocasión, Silva ha pretendido apartar a Susana Polo porque, en su opinión, ya participó en el tribunal que le negó acceder a los correos del exbanquero porque pertenecían al ámbito de su intimidad en el otro procedimiento que tiene abierto por prevaricación, por el que será juzgado a partir del 7 de julio. La magistrada frenó la pretensión del imputado pocas horas después de que éste abandonara la sede del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), donde estaba citado a declarar ayer, al rechazar de plano la recusación por considerarla "manifiestamente infundada". - Efe