Bilbao. El sector vasco de construcción naval está cerca de firmar media docena de nuevos contratos a corto plazo. El sector podría dejar así en popa la marejada creada este 2013 con la sentencia del tax lease y avanza ya en busca del impulso del viento que le lleve a aguas tranquilas, el esperado próximo 2014. En ese oasis que hasta hace pocos meses parecía difícil de alcanzar, los astilleros vascos podrían volver a la normalidad. Si esta semana Astilleros Balenciaga anunció la contratación de la construcción de dos nuevos buques, según ha corroborado DNA las buenas noticias en forma de contratos podrían extenderse a otros astilleros vascos.
El próximo día 16 está prevista una nueva reunión del grupo de Trabajo constituido en julio con agentes del Gobierno Vasco, del Foro Marítimo, de empresas del sector y representantes de comités de empresa de los astilleros. En ese encuentro, según fuentes del sector consultadas, podrían anunciarse nuevos contratos para astilleros vascos. Son varios los acuerdos que se están cocinando y que podrían concretarse en próximas semanas.
En concreto, son hasta media docena los contratos que a corto o medio plazo podrían firmarse. Al tratarse de acuerdos no cerrados en su financiación aún la prudencia es obligada, pero algunos de esos próximos contratos están ya muy trabajados y podrían anunciarse incluso ese día 16. Así lo dejó entrever ayer incluso la consejera vasca de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, al anunciar que hay más contratos "en cartera a la espera de ser firmados" que se sumaran a los ya adelantados por Balenciaga. La consejera añadió que es por ello que futuro del sector naval se puede ver ya "con cierto optimismo". De hecho, la patronal española de pequeños astilleros Pymar adelantó el miércoles que había "siete buques" cuyos contratos podrían formalizarse próximamente y es previsible que entre los astilleros afectados se encuentre alguno vasco.
Parece por tanto que el sector naval está cerca de recuperar el rumbo, pese a que hace unos pocos meses parecía abocado a navegar a la deriva tras la decisión de la Comisión Europea de obligar a devolver las ayudas del denominado tax lease, lo que ocasionó una zozobra sin precedentes. "Frente a un escenario en el que nos encontrábamos hace siete u ocho meses y que era realmente complicado, hoy podemos decir que estamos en una situación realmente diferente" aludió ayer al respecto la consejera vasca de Desarrollo Económico. Tapia quiso poner en valor "el buen trabajo" de los astilleros privados vascos, "que han demostrado ser capaces de competir en el mundo global con cualquier otro, de atraer contratos y de saber prepararlos con un tax lease nuevo, un sistema nuevo complejo que no había utilizado nadie".
El sector está cerca de recuperar el ritmo de las contrataciones de nuevos buques tras recobrar la confianza de los inversores con el nuevo sistema de deducciones fiscales, o tax lease, aprobado hace un año por el Gobierno español con la autorización de la Unión Europea, un nuevo sistema al que ha tenido que adaptarse. Ayer mismo la Comisión Europea decidió prorrogar hasta el 30 de junio de 2014 el actual régimen de ayudas de Estado a los astilleros
Fuentes de La Naval de Sestao, el mayor astillero vasco, señalaron ayer a este diario que el hecho de que un astillero vasco haya vuelto a contratar aplicando por primera vez el nuevo sistema de tax lease español, "es una magnífica noticia ya que, además del hecho en sí, supone una vuelta a la normalidad en el sistema, lo que permitiría a los inversores volver a financiar nuevas contrataciones de barcos".
La confianza es un factor clave en este negocio y ahora parece que el viento empuja una nueva ola a la que podrían subirse los astilleros. En este sentido, en La Naval confían que los nuevos contratos de Balenciaga permitan a la compañía vizcaína "cerrar en breves fechas algunos de los acuerdos que se han negociado en los últimos meses".
El director de La Naval, Iñaki Irasuegui, reconoció hace escasas fechas que el astillero de Sestao tenía abiertas negociaciones y ofertas para construir media docena de buques. Es posible que en próximas fechas haya noticias al respecto en La Naval. También Zamakona, Murueta o Balenciaga podrían concretar nuevos pedidos que generarían nuevas cargas de trabajo.