BILBAO. "No está previsto el cierre de la planta de Ermua", señaló ayer la dirección de la empresa Tenneco Automotive Iberica a través de una nota, al ser interrogada sobre un supuesto documento interno de la compañía que contempla el traslado paulatino de la producción a los países del Este de Europa.
Fuentes de Tenneco declinaron contestar sobre si la multinacional estadounidense contempla desplazar líneas de producción de la factoría vasca de Ermua a Polonia en los próximos meses y se remitieron a una nota en la que sí reconocen que han salido a la luz documentos sobre los planes de la compañía. En el citado documento se señala que "Tenneco está llevando a cabo una investigación para identificar el origen de la fuente que ha filtrado información interna a los medios de comunicación españoles. La compañía considera este acto extremadamente grave ya que representa un quebrantamiento de la confidencialidad".
La dirección sí coincide con los argumentos de los trabajadores de Ermua, unos 570, que señalan que la factoría vizcaína "es una de las más flexibles de Tenneco en Europa" ya que combina la complejidad de la tecnología más desarrollada para fabricar equipo original de amortiguadores para automóviles y la fabricación de pequeñas series de amortiguadores de recambios. La empresa recuerda que "Ermua es también el centro de excelencia para la fabricación de amortiguadores electrónicos".
Trabajadores de la fábrica vasca de amortiguadores Monroe señalaron ayer que el comité de empresa mantiene diversas reuniones y no tiene previsto realizar declaración alguna por el momento. La dirección sí transmitió a la plantilla un mensaje de tranquilidad, de que no se cierra la planta y que a corto plazo incluso se contempla aumentar producción.
El pasado 5 de septiembre, Tenneco anunció su intención de cerrar la planta de componentes de automóvil en Gijón y reducir su planta de componentes en Sint-Truiden (Bélgica). En octubre se señaló oficialmente que la producción de amortiguadores para los fabricantes de coches se trasladaría desde los centros citados a Gliwice (Polonia) y Ermua (Euskadi) pero el proyecto llamado G+ contempla, supuestamente, el posterior cierre escalonado de Ermua.