Madrid. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, negó ayer que España vaya a pedir el rescate a Europa de forma inminente. En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes, Rajoy contestó con un simple "no" a la pregunta de si España tiene pensado pedir la ayuda a Europa de forma inminente.
El jefe del Ejecutivo desmentía así las informaciones que apuntaban que España estaba dispuesta a pedir el rescate este fin de semana.
Después, cuando volvió a ser preguntado por las noticias y supuestas filtraciones que se suceden sobre España y un posible rescate, Rajoy bromeó con los medios al señalar que él jamás ha hecho una filtración en su vida ni piensa hacerla, y por eso es "tan popular" entre "algunos periodistas".
Incluso hay días que las filtraciones son contradictorias, señaló el presidente, quien ante las informaciones que apuntaban que España iba a solicitar el rescate este fin de semana señaló: "Pues muy bien".
Acto seguido, Rajoy invitó con ironía a los periodistas a creerse una u otra versión, la suya o la que apunta a la petición inminente de rescate.
"Caben dos posibilidades, que esa agencia tenga razón y mejor información que yo, lo cual es muy posible, o que no sea así, lo cual... pues a lo mejor también es posible o no, qué más da", añadió.
Tras ello, Rajoy volvió a responder a los informadores con un escueto "no" a la pregunta sobre una solicitud inmediata de rescate, y lo hizo apostillando con otra nueva ironía: si les "sirve de algo" lo que él pueda decir y si lo consideran "más importante" que las filtraciones. "A lo mejor aciertan", concluyó en tono de humor Rajoy a esta cuestión.
Según fuentes del Palacio de la Moncloa, para el Ejecutivo del PP lo prioritario en este momento es cumplir con los acuerdos alcanzados en el último Consejo Europeo de Bruselas para avanzar en la unión bancaria y fiscal, y no si España acude ya o no al mecanismo que ha activado el Banco Central Europeo para comprar deuda, porque eso es lo que hace que descienda la "presión" de los mercados y baje la prima de riesgo. Las mismas fuentes insistieron ayer en que no hay "ninguna urgencia" en relación con el rescate, ya que, el Gobierno tiene que estudiar "en detalle" cuáles son las condiciones, qué efectos tendrán para la economía estatal y si esa solicitud cuenta con el respaldo de todos los socios europeos. Son muchas las voces que aseguran que esa hipotética petición podría verse frenada por las dudas surgidas dentro del Gobierno alemán. Angela Merkel, la canciller germana, teme toparse con problemas para sacar adelante la nueva inyección de dinero. Sin el apoyo del mayor referente económico de Europa, no está claro que Rajoy se aventure a dar el paso de solicitar ese segundo rescate.
Quizá ambos países acerquen posturas hoy mismo, ya que el ministro de Economía, Luis de Guindos, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Industria, José Manuel Soria, se reunirán en Madrid con el ministro de Economía alemán, Philipp Rösler.
Por otra parte, la consejera delegada de Bankinter, Dolores Dancausa, afirmó que la petición de ayuda a Bruselas debe realizarse y debe hacerse "cuanto antes" porque será una buena noticia para los bancos y las empresas españolas, ya que, de esta forma, comenzarán abrirse los mercados y a reactivarse la economía española.