MADRID. El rendimiento del bono español a diez años, cuyo diferencial con el alemán del mismo plazo mide el riesgo país, subía hasta el 7,701 %, en tanto que la rentabilidad del bono germano era del 1,234 %.
Al concluir la sesión precedente, la prima de riesgo de España alcanzó un máximo al cierre de 638 puntos básicos, después de que una subasta de letras a corto plazo del Tesoro Público no lograra apaciguar a los inversores.
Pese a que España saldaba la víspera una emisión de letras con una moderada subida del interés y una fuerte demanda, el mercado consideraba insuficiente el respaldo de los inversores, sobre todo después de que Cataluña haya dejado entrever que también podría acogerse al fondo de liquidez autonómico, tal y como ya hizo Valencia y como tiene intención de hacer Castilla La Mancha y Murcia.
Ninguno de los esfuerzos del Gobierno parece tener efecto en un mercado de deuda que ha sentenciado a países como Grecia, Portugal e Irlanda, y que parece dispuesto a hacer lo mismo con España e Italia.
La prima de riesgo del país transalpino comenzaba la sesión en 541 puntos básicos, al tiempo que la rentabilidad del bono italiano subía al 6,652 %.
El riesgo país de estados que ya han solicitado ayuda de la Unión Europea no experimentaban grandes cambios, de modo que la de Irlanda era de 509 puntos básicos, la de Portugal 989, y la de Grecia, 2.820.
Los seguros de impago de deuda ("credit default swap" o CDS), relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares marcaban en la apertura un nuevo récord y se cambiaban a 575.360 dólares anuales.
De este modo, los CDS de España se mantienen como los quintos más caros del mundo, sólo por detrás de los de Argentina, Venezuela, Ucrania y Portugal.
Respecto a los futuros, los que adelantan el comportamiento de la deuda europea subían al 145,08 %, desde el 145,03 % anterior, en tanto que los que predicen el futuro de la deuda estadounidense comenzaban la jornada en el 153,09 %.