Bilbao. LA crisis económica ha hecho surgir la tesis de que Euskadi, en particular, y el Estado español, en general pasan por esta complicada situación por la pérdida de competitividad y la falta de productividad de sus empresas. Pero la realidad muestra que en los últimos años de recesión las compañías vascas han incrementado su productividad y han ganado competitividad en los mercados exteriores

Un esfuerzo titánico de las empresas para ahorrar costes, mejorar sus productos y esforzarse más en su comercialización exterior combinado, en muchos casos, con un ajuste a la baja de las plantillas y contención salarial ha obrado un pequeño milagro. El pasado año 2011, la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) efectuó unas exportaciones por importe de más de 21.000 millones de euros, una cifra récord que supone el doble que los Presupuestos del Gobierno Vasco de este año, tras contabilizar un crecimiento del 20%. Las importaciones crecieron en menor medida, un 12%, con el resultado de que la CAV cerró el año con superávit comercial y una cobertura de las exportaciones sobre las importaciones del 123%, ocho puntos más que el año anterior, según el Eustat.

En el conjunto del Estado español las exportaciones también se incrementaron en un 15% confirmando esa mejoría de la competitividad de las empresas del Estado.

La CAV exporta un 31% de su producción, en 2010 era el 27%, frente al 20% del Estado español que también ha subido pero menos pues partía de un 17%. Con estos porcentajes el País Vasco se sitúa por encima de Italia, 24%, Francia, 22%, aunque lejos de Alemania, 42%. Un informe de Orkestra, el instituto de competitividad de la Universidad de Deusto, presentado el pasado año reconoce que "la evolución de la productividad vasca ha sido espectacular desde 2002, por encima de la española y de la UE-27; superando a partir de 2005 a la de la UE-15". El informe advertía de la necesidad de controlar los costes laborales en la industria manufacturera para no perder competitividad porque a la industria vasca le falta productos de alto valor añadido e innovador y tamaño a sus empresas. Para crecer más, la economía vasca no tiene otra opción que aumentar sus cuotas de exportación y para ello tiene que controlar los costes laborales unitarios, sobre todo mejorando la productividad y diversificar, según se recoge en el informe de Orkestra.

En el caso del Estado español el aumento de la exportación en estos años de crisis, -pese a la caída del primer trimestre del presente año por el estancamiento de las economías de la Unión Europea, primer destino de las ventas al exterior de las empresas del península ibérica-, y la mejora de la competitividad, como consecuencia de la caída de los costes laborales unitarios, ha permitido un incremento de la productividad española del 11% desde 2008.

El incremento de la productividad de España ha sido el mayor de entre los países de la zona euro, según indica el Observatorio Económico de BBVA Research. Si comparamos la evolución en estos años de crisis de las exportaciones entre los países miembros de la Unión Europea se ve que Euskadi se ha situado en puestos de cabeza entre los territorios que más han aumentado las ventas en el exterior pero es que el Estado español es el segundo en el ránking de crecimiento de exportaciones, vendiendo al extranjero un 9,5% más que antes del comienzo de la crisis

La productividad española ha registrado un crecimiento del 11% desde 2008, el mayor incremento entre los países de la zona euro, gracias a sus elevadas tasas de exportación y a la mejora de la competitividad, motivada por la caída de los costes laborales unitarios, según el referido informe del BBVA Research.

En concreto, el estudio del banco vasco remarca que las exportaciones se han recuperado en un 30% desde sus mínimos, y que España exporta en la actualidad un 9,5% más que antes de la crisis, sólo superado por Estonia, un país muy pequeño que no es especialmente significativo. El resultado del informe es que el peso de las exportaciones en el PIB ha aumentado y está en línea con el peso que tienen las exportaciones en economías como Francia o Italia .

Respecto a los costes laborales unitarios se ve que tras los incrementos registrados hasta 2007, las economías periféricas como la española han logrado aumentar su competitividad en los últimos cuatro años al experimentar caídas en torno al 5%, frente al crecimiento experimentado por el conjunto de la zona euro.

Un informe del banco francés Natixis reconoce que los países del sur de Europa, España, Italia, Grecia, Portugal, Francia y Bélgica, además de Irlanda, han perdido competitividad desde la entrada de la moneda única con un aumento de precios y de salarios superior a los de Alemania pero si se mira la cifra de los costes salariales, la productividad para gamas similares de productos y el peso de las exportaciones se constata que "España, Portugal, Irlanda y Bélgica sí son competitivos y Francia, Italia y Grecia no lo son".

Los analistas lo tienen claro "Euskadi, con unos costes salariales un 24% superiores a los de la media española, es plenamente competitiva respecto a Alemania en empresas de tamaño similar y fabricando gamas parecidas de productos".

¿Dónde está el problema? En el pequeño tamaño de las pymes en comparación con las alemanas lo que lastra las inversiones en innovación y la necesaria internacionalización. "La industria vasca, por ejemplo, de componentes de automoción fabrica perfectamente los elementos mecánicos de la suspensión de un coche y nuestras plantas son competitivas con las alemanas que hacen lo mismo. El problema es que son elementos con márgenes pequeños y una presión creciente de la competencia de los países de bajo coste y aquí no fabricamos la inyección electrónica, como hace Bosch en Alemania, que deja mayores márgenes", afirma el responsable de una compañía vasca del sector.

Un informe de la SPRI sobre la competitividad de las empresas vascas afirma que su mayor hándicap pasa "por su reducida dimensión frente a sus clientes y competidores" y su "escasa capacidad para desarrollar y lanzar al mercado productos radicalmente innovadores".

En todo caso, el informe de Natixis señala que la rebaja de salarios no es la receta adecuada para todos los países de la UE porque la relación competitividad-costes de España, Portugal o Irlanda es adecuada, no así la de Italia, Francia y Grecia

Los costes salariales vascos son un 24% más altos que la media del Estado español

Euskadi exporta un 31%, más que Francia, 22%, aunque lejos del 42% de Alemania