SANTANDER. "He tenido una buena relación institucional con todas las personas que están metidas en esta operación, tanto de un lado como de otro, y por eso pido que nos dejen al margen y en paz, que ya tenemos bastantes problemas", afirmó el ministro durante el Encuentro de Telecomunicaciones de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

"Que utilicen sus herramientas para atacar al otro, pero al Gobierno que le dejen en paz", señaló, antes de asegurar que "el Gobierno no interviene en este tipo de participaciones" y de pedir "a los protagonistas" que "dejaran al margen" al Ejecutivo.

Sebastián consideró además que el acuerdo entre Sacyr y Pemex "garantiza" la españolidad de Repsol y respondió a las reticencias de Felipe González sobre esta cuestión recordando que el expresidente del Gobierno es consejero de Gas Natural Fenosa, participada en un 30% por la petrolera.

"Pemex entró en Repsol cuando González era presidente del Gobierno", afirmó, antes de recordar, en alusión a Sonatrach, que, desde que el expresidente participa en Gas Natural, "una empresa argelina pública ha entrado con un 4% en el capital". "No creo que nadie haya puesto en duda la españolidad de Gas Natural, que también es una empresa estratégica", afirmó.

"Lógicamente, nosotros somos neutrales porque no participamos en ninguna empresa privada, mientras que el expresidente del Gobierno está en el consejo de una empresa", afirmó, antes de asegurar que "la españolidad está bien definida" en el acuerdo entre Sacyr y Pemex.

PRINCIPAL ACCIONISTA ESPAÑOL

"Con españolidad nos referimos a dos cosas: que el principal accionista sea español, lo que se cumple, y, segunda, que la suma de la participación de las empresas españolas sean mayor que la suma de la participación de las empresas extranjeras. Estas dos cosas se cumplen y en ese sentido creemos que se garantiza la españolidad", afirmó Sebastián.

El ministro también aseguró que el Gobierno considera que la operación es "estrictamente empresarial" y que su "margen de actuación para evitar operaciones empresariales es prácticamente nulo".

"PENDIENTES" DE LA ESPAÑOLIDAD

"El Gobierno no interviene en este tipo de participaciones y por eso pedimos a los protagonistas que nos dejaran al margen porque el Gobierno no toma partido ni está detrás de ellas. Lo único que le interesa es que una empresa estratégica cuyas reservas son las reservas de España continúe siendo española. Esto es lo único que nos preocupa y a lo que estaremos pendientes", aseveró.

Sebastián negó además tener amistad con el presidente de Sacyr, Luis del Rivero, ni con "ningún presidente de ninguna compañía". Además, dijo "no haber hablado más veces con Antonio Brufau (presidente de Repsol) que con el señor Del Rivero". "Estoy dispuesto a reunirme con quien me lo pida", aseguró.