vitoria. El responsable del fondo europeo de rescate (FEEF), el alemán Klaus Regling, descartó en una entrevista en el rotativo Handelsblatt que España vaya a tener que recurrir a este mecanismo financiero. "No cuento con ello. El Gobierno español ha reducido el déficit y ha reformado la economía", aseguró el economista alemán al ser preguntado sobre la posibilidad de que España recurra a la ayuda financiera de emergencia. Además, subrayó que su posición a este respecto es también la de los mercados financieros, que han asumido "que la aguda crisis crediticia ha quedado reducida a tres pequeños países con una proporción de sólo el seis por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la Unión Europea (UE)".

Regling añadió que España puede asumir financieramente "todos los escenarios" previstos hasta ahora, independientemente de la cantidad final de dinero público que sea preciso aportar para sanear el sector bancario español. "El Gobierno español habla de 20.000 millones (para sanear las cajas) y en el mercado los cálculos se elevan hasta los 100.000 millones de euros. Cuál será la cantidad, no lo puedo decir. Pero todos los escenarios son asumibles para España", afirmaba el responsable del FEEF. "Incluso si se cumplen las estimaciones más alarmistas, el dinero necesario para apoyar al sector bancario español no excederá el 10%. Nada que ver con el 30% que ha necesitado el salvamento del sector financiero irlandés", concluyó.

Grecia Regling apuntó asimismo que no considera preciso que Grecia reestructure su deuda y criticó que los medios de comunicación y las entidades financieras "estén calentando el debate" porque "podrían hacer mucho dinero" con un proceso así. El responsable del fondo europeo de rescate consideró que la economía griega tiene la capacidad, "tras las profundas reformas" a las que ha sido sometida, de remontar el vuelo sin una reestructuración de la deuda, tal como lo hicieron otras economías de Asia y América Latina tras problemas de endeudamiento similares. "En los años 80 y 90 los bancos recibieron unos ingresos muy elevados por las reestructuraciones de las deudas estatales en América Latina y Asia. Les encantaría repetir eso mismo en Europa", agregó.

Finalmente, sobre el creciente malestar en Finlandia o Alemania, sobre la necesidad de apoyar a los países más endeudados, Regling dijo: "Hasta el momento los contribuyentes alemanes no le han regalado ni un solo euro. Todo son créditos que deben ser pagados", explicó.