Bilbao. La propuesta de ley vasca de cajas de ahorros presentada ayer por el Gobierno Vasco a una representación del PNV en el transcurso de una reunión celebrada en Vitoria "no busca reforzar el sistema financiero vasco", según fuentes nacionalistas, y dificulta la fusión plena de BBK, Kutxa y Vital. La iniciativa del Ejecutivo López busca aumentar el poder político de PSE y PP en los órganos de Gobierno de las cajas de la CAV para lo que introduce la reducción de la representación de las entidades fundadoras, -diputaciones y ayuntamientos-, e incluye la entrada de una delegación del Parlamento vasco y de entidades sociales de reconocido prestigio en el entorno, cámaras de comercio y patronales.

El consejero de Economía, Carlos Aguirre y el consejero de Transportes, Iñaki Arriola, se reunieron ayer con una representación de PNV formada por Ricardo Gatzagaetxebarria y Joseba Aurrekoetexea, para entregarles un borrador de la reforma de la ley vasca de cajas que se tiene que aprobar en los próximos meses para adaptarse a la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros (LORCA) estatal que entró en vigor el pasado verano.

El documento busca principalmente minar el poder del partido mayoritario vasco, en la actualidad el PNV, por la vía de modificar la composición de la asamblea general de las cajas. En la actualidad las cajas de la CAV cuentan con una asamblea general de 100 miembros de los que el 43% son elegidos por los impositores; un 30% es designado por las corporaciones locales de los municipios que cuentan con oficinas de la entidad; un 20% corresponde a los representantes de las instituciones fundadoras de las cajas, las diputaciones forales y los ayuntamientos de Bilbao, Donostia y Gasteiz, respectivamente, y un 7% en representación del colectivo de trabajadores de las cajas. El resultado es un 50% de representantes políticos y un 50% de impositores y trabajadores, la ley estatal quiere reducir al 40% la parte política.

La intención del Gobierno Vasco es, según una expresión de un representante nacionalista, "modificar las reglas de juego en mitad del partido", en la línea del acuerdo alcanzado previamente por el PSE y el PP que pretende reducir la cuota de las entidades fundadoras al 10%, e introducir una representación del Parlamento vasco proporcional al reparto del arco político, así como a entidades sociales de prestigio reconocido como Cámaras de Comercio y organizaciones empresariales.

El PNV cree que "el objetivo" de la reforma de la ley vasca de cajas del Gobierno de Patxi López "no es asegurar el futuro de las cajas sino controlarlas políticamente" con la excusa de adaptarlas a la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros (LORCA), aprobado el verano pasado y que da paso a la bancarización de las cajas y a la entrada de inversores privados. Para realizar la modificación de la ley de Cajas, el Gobierno Vasco introdujo en diciembre pasado en los Presupuestos de la CAV para 2011 una "disposición final sexta. Adaptación de la legislación de la Comunidad Autónoma del País Vasco en materia de Cajas de Ahorros".

En ella se señalaba que en el plazo de seis meses, -establecido en la disposición transitoria segunda del Real Decreto-Ley 11/2010, de 9 de julio-, de órganos de gobierno y otros aspectos del régimen jurídico de las cajas de ahorro, se realizará la adaptación de la legislación de las comunidades autónomas a lo dispuesto en el citado real decreto-ley, y los consecuentes plazos para adaptar los estatutos y nuevos órganos de gobierno de las cajas se iniciarán, en la CAV, a partir de la entrada en vigor (el uno de enero de 2011) de la presente ley por la que se aprueban los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Euskadi para el ejercicio 2011. El PNV reprochó duramente al consejero de Economía, Carlos Aguirre, que argumentara como un obstáculo para la fusión de las tres cajas de la CAV que el PNV está "sobrerrepresentado" en las cajas de ahorro vascas y que si se planteara una fusión "caliente" de las tres entidades, "puede haber problemas políticos y también de pesos económicos".

En el partido jeltzale liderado por Iñigo Urkullu no hay duda alguna de "el objetivo de la nueva ley vasca de cajas será alterar el sistema electoral para conseguir que el PSE y el PP puedan ejercer su control político en BBK, Kutxa y Vital".

En la misma línea desde la representación nacionalista aseguró que socialistas y populares quieren "extender el modelo que han aplicado en el Estado español y que ha llevado a la mayoría de las cajas de ahorros a una situación cercana a la quiebra e incluso a su desaparición". El PNV recuerda que el modelo de las cajas vascas, "basado en la gestión profesional y la implicación y compromiso social y económico de las cajas en cada uno de los territorios" es un modelo de éxito que ha permitido, y no hay más que ver los rankings con los test de stress europeos, que dicho modelo, el que se quiere cambiar ahora, el Gobierno de Patxi López "ha llevado a las cajas vascas a ser las más eficientes, rentables y seguras del sistema bancario español" y que ello se debe "en parte" a "la actitud de la representación política en los órganos de dirección de las cajas hasta este momento". Además, el PNV rechaza la apuesta del Gobierno Vasco por una fusión fría entre BBK y Caja Vital.