madrid. Merrill Lynch Wealth Management cree que la segunda fase de recapitalización de las cajas de ahorros, cuyo coste será inferior a los 40.000 millones estimados por algunos sectores del mercado, se hará sin la entrada de capital privado, que no llegará a tiempo. Esta estimación se aleja de las declaraciones del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien aseguró hace unos días que el capital privado fortalecerá el sistema financiero y ayudará a cerrar la reestructuración de las cajas.

En declaraciones al rotativo británico Financial Times, el jefe del Ejecutivo afirmaba que alguna aportación del Estado sería necesaria si resulta insuficiente la opción preferida del Gobierno, el capital privado, pero no dice que las cajas requieran grandes inyecciones de dinero público. Durante la presentación de las perspectivas de mercado para 2011, el director de inversiones de la gestora para España y Portugal, Alberto Spagnolo, explicó que la clave está en el crecimiento de la economía, ya que en este momento el dinero privado no puede entrar en las cajas "aunque quiera", dado que necesita una serie de garantías ocn las que ahora mismo no cuenta.

Además, este capital privado no habrá llegado antes de que estas entidades se sometan a la nueva ronda de test de estrés a la que se tendrán que someter en el primer semestre del año, pruebas que serán más rigurosas y se llevarán a cabo en un momento en que las perspectivas de recuperación económica siguen sin ser buenas. La financiación para las cajas de ahorros, añade, está cerrada.

El directivo aseguró que la reestructuración del sistema financiero español "acumula un importante retraso", lo que repercute en mayor dificultad para la recuperación del crédito. En este sentido, advirtió de que en los próximos trimestres puede haber un crecimiento negativo del crédito.

Para reducir el endeudamiento y la dependencia de la financiación exterior es preciso mejorar las exportaciones y atraer capital externo, para lo cual es imprescindible profundizar en las reformas y mejorar la competitividad.