Donostia. La compañía Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles, CAF, prepara su asalto al que podría ser el mayor contrato de su historia, el primero para larga distancia de alta velocidad en Estados Unidos, con un valor de 2.800 millones de euros. La operadora pública estadounidense Amtrak licitará posiblemente el próximo año la construcción de la línea que unirá las principales ciudades de la Costa Este de EEUU, conectando Boston y la capital, Washington, en un trazado que tendrá como punto intermedio Nueva York.
La firma vasca competirá por el primer gran proyecto de alta velocidad que la Administración Obama pondrá en marcha en el país, donde existen líneas de la llamada velocidad alta (máximo 250 kilómetros por hora) pero no de alta velocidad (hasta 350 kilómetros por hora). Amtrak presentó hace tres meses su futuro servicio Next-Gen, en el que pretende unir los 700 kilómetros que separan a Boston y Washington en apenas tres horas, conformándose en un auténtico competidor del transporte aéreo.
En el corredor noreste se concentra una población de unos 50 millones de personas -una sexta parte del país-, la mayoría de ellas en Nueva York, Washington, Philadelphia, Boston y Baltimore. Todas estas ciudades estarán conectadas por la línea de Amtrak, que prevé una inversión total de 89.200 millones de euros.
CAF aspirará a ese jugoso contrato, para el cual continúa en fase de pruebas de su modelo Oaris, la apuesta de la firma beasaindarra por la alta velocidad. Es un tren capaz de transportar a 500 pasajeros, con lo que cumpliría con creces los requerimientos que exigirá Amtrak en el futuro concurso público. La compañía estadounidense -la principal del país norteamericano en el mercado del transporte terrestre- contempla trenes de ocho coches y dos máquinas tractoras, que lleven a 400 personas. La velocidad máxima que fijará Amtrak para los vehículos de la licitación será de 220 millas por hora (354 kilómetros/hora) y requerirá que los trenes incluyan una primera clase y una clase business y cuenten con un coche restaurante y otras comodidades como conexión wi-fi.
presencia de caf en eeuu Se desconoce cuántas unidades de tren de alta velocidad sacará a concurso pero el número será elevado, puesto que los vehículos darán servicio a varias rutas, en cuatro líneas, dentro del corredor noreste. Las nuevas líneas atravesarán seis estados del país. Amtrak tiene intención de ponerlas en marcha a partir del año 2030. Según sus cifras, de los 12 millones de pasajeros que actualmente mueve al año en sus líneas regulares, pasaría a transportar unos 38 millones, de los que 20 millones viajarían en alta velocidad. El hecho de que sean varias las líneas que pondrá en funcionamiento Amtrak hace pensar que lanzará más de un concurso o uno solo en varios lotes, de tal manera que la cifra de 2.800 millones se dividirá en paquetes.
La empresa guipuzcoana no es una desconocida en Estados Unidos y mucho menos en la Costa Este. Allí dispone de una oficina comercial en Washington y posee desde hace diez años una planta de producción de 150.000 metros cuadrados en la ciudad de Elmira, en el estado de Nueva York. Además, CAF cuenta con centros de montaje, atención al cliente y mantenimiento en Hunt Valley (Maryland) y, en la costa del Pacífico, en la capital de California, Sacramento.
Su presencia en el país y su oferta competitiva permitió a la firma beasaindarra adjudicarse este mismo año un contrato de trenes de larga distancia por valor de 230 millones de euros precisamente para Amtrak. De este modo, CAF ha dado un gran salto en EEUU, pues anteriormente solo había fabricado tranvías y metros en un país que está a punto de iniciar su gran apuesta por la alta velocidad.
Para ello, el Gobierno de Barack Obama ha reconocido que ha tomado como ejemplo el caso del AVE español. De hecho, en la presentación del plan Next-Gen, Amtrak ha incluido numerosas referencias al rápido desarrollo del sistema de alta velocidad en España, ilustrando su informe sobre el proyecto del Corredor Noreste con imágenes del AVE, las estaciones de Madrid y Sevilla e incluso viaductos. Es más, representantes institucionales de varios estados de EEUU como Illinois, Minnesota, Ohio, Iowa o Texas visitaron en septiembre del año pasado las instalaciones de CAF en Beasain, interesados por la alta velocidad, en un viaje que incluyó la asistencia a los centros de Renfe, Adif y Talgo.