A la hora de alquilar un inmueble, surgen muchos interrogantes para el arrendatario, pero especialmente para el arrendador. Quien posee una vivienda o un local y decide ponerlo en alquiler se enfrenta a muchas incógnitas, tanto legales como económicas, que condicionan la puesta en el mercado de dicha propiedad.

Por lo tanto, para prevenir cualquier contratiempo o, simplemente, estar informado de posibles problemas de impagos del inmueble, hay soluciones para saber cómo actuar con rapidez.

Obras de construcción de un bloque de viviendas públicas de alquiler en Gasteiz. Jorge Muñoz

Cómo evitar los impagos de alquiler

Un buen método es hacer una entrevista personal a los potenciales candidatos a alquilar el inmueble para conocer a fondo al usuario. Con esta toma de contacto, se podrá saber si la persona es la adecuada o, si por el contrario, es mejor buscar a otra.

También hay alternativas,como dar con un seguro de hogar adaptado a las necesidades del arrendador. Gracias a sus servicios, podemos encontrar diferentes coberturas de daños, así como asistencia jurídica en caso de impagos.

Reclamar un impago

Para resolver una situación de impago, se puede reclamar desde el primer mes con la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de Arrendamientos Urbanos lo explica en su artículo 27, que ampara el Código Civil.

En caso de que un inquilino no abone el importe de un mes, lo ideal sería resolverlo por la vía amistosa. Si se trata de una persona puntual que se retrasa por ciertos motivos, siempre existe la posibilidad de llegar a un trato que beneficie a ambas partes.

Sin embargo, si el inquilino no tiene la intención de seguir pagando el alquiler o, si lo hace a cuentagotas, el arrendatario dispone de medios para poner fin a esta situación, si bien no son inmediatas y llevan su tiempo.

El primer paso sería enviar un burofax con un requerimiento de pago con la ayuda de un abogado. Si transcurre un mes y el inquilino no responde o continúa sin pagar, entonces hay que recurrir a un proceso de demanda por impago de alquiler.

En este caso, tenemos tres opciones en función de lo que queramos alcanzar: reclamar la deuda, solicitar el desahucio o y si es posible, solicitar el desahucio.

Actuar con eficacia

Hay que recordar que este proceso puede ser largo y costoso. Aun así, y si el inquilino no ha cumplido con la parte del acuerdo, no queda más remedio que explorar otras vías para que se respete la propiedad del arrendador.

En este camino, es importante contar con el asesoramiento y la ayuda de profesionales, ya sean abogados, expertos inmobiliarios y empresas que trabajan gestionando este tipo de trámites .

Datos del alquiler en 2023

La vivienda en alquiler cerró 2023 en máximos, con un precio que rondó los 12 euros/m2 –13,2 en Euskadi– y una oferta en mínimos que los principales portales inmobiliarios achacan a las distintas medidas regulatorias que se han ido aplicado.

De acuerdo con los datos que manejan tanto Idealista como Fotocasa, los crecimientos de precios fueron constantes a lo largo de 2023, y en muchas regiones llegaron a batir sus máximos ante un desequilibrio entre la oferta y la demanda que no deja de acentuarse y que está expulsando a los ciudadanos con las rentas más bajas.

El portal inmobiliario Idealista, en base a los anuncios publicados en su plataforma, cifra la subida de los alquileres en un 10,1% hasta cerrar 2023 en una media de 12,1 euros/m2, cifra que a su vez arroja un incremento trimestral del 2,7%.

Según sus datos, Barcelona es la capital más cara para alquilar una vivienda (20,5 euros/m2), seguida de Madrid (17,9 euros); Donostia (16,8 euros) o Palma (15,4 euros), precios que contrastan con los de Zamora (6,2 euros), Ciudad Real (6,6 euros), Lugo (6,6 euros) o Cáceres (6,7 euros).

Los precios de los alquileres se han encarecido con fuerza en los últimos años. EP