Nada como el calor para combatir al general invierno. Con esa idea, Peña II y Albisu pretendían un incendio. Un duelo a fogonazos, como las bocanadas de un dragón. Artola e Imaz preferían el crepitar de las maderas en el fuego bajo. Dos maneras de subir la temperatura. De ver la vida. Más agitada la del tolosarra y el ataundarra, más serena la del alegiarra y el oiartzuarra.
Esas dos ideas confrontaron en el frontón de Etxebarri. En el Parejas, un campeonato de aliento largo, pero que virado el Cabo de Hornos cada vez resulta más exigente, Artola e Imaz recolectaron su cuarto triunfo ante Peña II y Albisu en un duelo sin aspavientos, donde se impuso la prosa del trabajo y la luz del alegiarra, que elevó el tono en el momento exacto.
Artola-Imaz 22
Peña II-Albisu 15
Duración: 75:06 minutos.
Saques: No hubo.
Pelotazos: Se cruzaron 719 pelotazos a buena.
Tantos en juego: Artola, 9, Peña II, 5 y Albisu, 3.
Errores: Artola, 6, Peña II, 8, Imaz, 1, Albisu, 5.
Marcador: 0-1, 1-1, 5-1, 5-6, 6-6, 6-8, 7-8, 8-8, 9-8, 9-12, 17-12, 17-13, 20-13, 20-15 y 22-15.
Incidencias: Partido correspondiente a la liguilla de cuartos del Parejas disputado en el frontón de Etxebarri. Media entrada. El dinero salió prácticamente a la par. En el primer duelo, correspondiente al Serie B, Larrazabal-Eskiroz superaron a Zubizarreta-Ugartemendia por 22-15.
Peña II no tardó en abrir fuego. Le quema el interior. Se anunció con una parada al txoko de fábula. Eso le define: la aceleración y el frenesí. Imaz y Artola dieron carrete a un error de Albisu y engarzaron cuatro tantos consecutivos con una pelota más mansa.
Padecía Peña II y no se acomodaba Albisu, que en ese tramo tuvo que desplazarse demasiado y se le apelmazó el tajo. La termita del cansancio le esperaría más adelante.
Igualdad en el tramo inicial
La tacada fijó a Artola e Imaz en la buena senda después de un par de tantos duros y estéticos remates del alegiarra. Cometió un error Artola y se recompusieron Peña II-Albisu, que voltearon la dinámica (5-6) con una material más vivaracho.
Con todo, el debate era cada vez más árido y se persiguieron y se abrazaron hasta prácticamente el meridiano, cuando Albisu sumó dos buenas cortadas y su delantero celebró una parada al txoko. Las sonrisas se les apagaron más tarde.
Artola toma el mando
Sucedía que el duelo pesaba. A los cueros les faltaba brillo y la fatiga también colgaba de los gerrikos. Artola e Imaz, mejor vertebrados, se revolvieron.
Se pusieron al frente con la contundencia de Artola, fresco el brazo. Del 9-12, pasaron a dominar 17-12. Una tacada de ocho tantos a ritmo de Artola, por el que todo gravitaba.
El de Alegia, confiado, exuberante, trabajaba, aliviaba a su zaguero, apretaba, empujaba y remataba. Suyo era el mando. Imaz, consistente, le servía de apoyo.
El pleito entró en la fase decisiva con una renta formidable (20-13) para Artola e Imaz, que lograron una victoria estupenda porque también se sacudieron el average en contra. Artola elevó el tono y sentenció