Mikel Landa será el líder del Bahrain Victorious en la 75 edición del Criterium del Dauphiné, entre los próximos 4 y 11 de junio, donde el ciclista alavés afinará su puesta a punto para el Tour de Francia.

Mikel Landa contará con un potente equipo a su lado para buscar un lugar en el podio de la carrera que se considera como ensayo general para el Tour de Francia que comienza el 1 de julio en Bilbao.

La formación la completan Jack Haig, Edoardo Zambanini, Fred Wright, Kamil Gradek, Matevz Govekar y Hermann Pernsteiner.

El director deportivo, Neil Stephens, confirmó el liderazgo de Landa en el Dauphiné, carrera en la que no ha participado Landa desde 2020, cuando acabó en el puesto 18 y fue cuarto más tarde en el Tour.

"Tradicionalmente esta es la carrera de preparación francesa antes del Tour, lo que también significa que será dura porque muchos ciclistas luchan por su lugar en el Tour. Nosotros tenemos algunos corredores del Giro y otros que regresan a la competición. Landa será el líder y contará con el apoyo de Jack Haig, quien llega fuerte a la carrera después del Giro", comentó Stephens.

En referencia a las etapas, señaló Stephens que "no hay jornadas reales de esprint que se adapten a nuestros corredores, así que buscaremos correr duro, afinar para el Tour y clasificarnos lo más alto posible en la general".

La 75.ª edición de la carrera consta de ocho etapas, comienza en Chambon-sur-Lac para emprender después una ruta montañosa antes de la meta final en La Bastille â Grenoble Alpes Métropole después de recorrer 1.207,2 km y 21.714 metros verticales de desnivel.

La carrera también presenta una contrarreloj individual a mitad de semana en la etapa 4 y, aunque es relativamente plana, la ruta de 31,1 km contribuirá a decidir la clasificación general.

Aparte de la CRI, la séptima etapa será decisiva en la batalla por el amarillo, ya que presenta el final de etapa más alto de la historia en el puerto de Col de la Croix-de-Fer a una altitud de 2.067 metros.

El escenario cuenta con más de 4.000 metros de desnivel a lo largo de solo 147,9 km, y no habrá descanso hasta el último día, donde el pelotón nuevamente tiene más de 4.000 metros verticales para abordar antes del corto y empinado final cuesta arriba a La Bastilla que promedia el 13,6% en 1,8 km.