Mientras el Alavés sumaba momentáneamente la victoria sobre el césped ante el Huesca, Mendizorroza vivió este domingo con cierto temor un incidente ajeno al espectáculo que se registró al poco de iniciarse la segunda mitad.

Pocos días después de lo sucedido en el Nuevo Mirandilla de Cádiz con el infarto sufrido por un seguidor ‘amarillo’ en pleno partido ante el Barcelona, motivo por el cual el árbitro Carlos Del Cerro Grande detuvo la velada durante cerca de una hora ante la incertidumbre generalizada, también se encendieron las señales de alarma en el recinto albiazul ante la indisposición sufrida por un seguidor alavesista.

Varios sanitarios acudieron con un desfibrilador a la grada ubicada en Preferente para atender a un hombre que se sintió mal en pleno encuentro. En la grada se organizó un pequeño tumulto después de que también acudieran a la zona los vigilantes de seguridad con el fin de esconder la identidad del aficionado en cuestión.

Tras unos minutos de suspense, ha sido trasladado a un hospital. Todavía no se conoce cuál es su estado de su salud, pero el episodio no reviste en principio tanta gravedad como lo sucedido días atrás en tierras gaditanas.