oto nos ha hecho soñar con la victoria de etapa e incluso con ponerse de líder después de que se haya metido en una fuga de mucho nivel. Para nosotros, como equipo, su actuación ha sido emocionante y demuestra que estamos en el buen camino. Estamos siendo protagonistas de la carrera. En la subida al Picón Blanco, de por sí muy dura, se ha sumado que el viento pegaba de cara. Eso hacía que se fuera más cómodo a rueda y que nadie intentara nada. Era muy difícil que se pudiera abrir un pequeño hueco y después mantenerlo. En mi caso he hecho una bonita subida y he podido estar entre los 20 primeros en la etapa. Me he sentido bien. El contacto con la montaña era un primer test para mí. En ese aspecto era una ascensión motivante y que me ha servido para saber que estoy en un buen estado de forma y con muchas ganas de hacerlo bien en las jornadas de montaña. Ahora llegan días más fáciles en teoría, pero cualquiera sabe qué puede pasar si hace aparición el viento. De todos modos, estoy seguro de que responderemos como estamos haciéndolo hasta ahora. Estamos funcionando muy bien como equipo y las fuerzas están ayudando en el arranque de la Vuelta. Si seguimos en esta línea puede llegar esa victoria tan soñada. Ha sido muy bonito ver durante la subida tantos aficionado vestidos de naranja. Estábamos en Burgos, pero nos hemos sentido como en casa. Se te ponía la piel de gallina. Hemos notado el calor de la afición y eso para nosotros es muy importante.