- El jueves levantó los brazos en señal de triunfo en Lekunberri, el viernes volvió a hacerlo en Iruñea y ayer en Durango, aunque tuvo que exprimirse de lo lindo, puso la guinda a su tríptico de victorias en carreteras vascas. La holandesa Annemiek Van Vleuten, del conjunto Mitchelton-Scott, volvió a demostrar que es letal en las carreras de un día y se adjudicó el éxito en la Durango-Durango Emakumeen Saria. La vigente portadora del maillot arco iris, a sus 37 años, conquistó su cuarta victoria en un año 2020 completamente mediatizado por la pandemia del covid-19 al llegar a meta en solitario con 18 segundos de ventaja con respecto a su compatriota Anna Van der Breggen (Boels-Dolsman), que tuvo que conformarse con la segunda posición, tras un ataque tan certero como incontestable en la última ascensión de la jornada, a ocho kilómetros del final.

La Durango-Durango Emakumeen Saria congregó finalmente en su línea de salida a un total de 139 corredoras de 24 equipos, un plantel de lujo, no en vano se dieron cita siete escuadras de la categoría World Tour. Con un recorrido total de 113 kilómetros, que incluían cinco ascensiones al alto de Miota y dos subidas en los kilómetros finales a Goiuria, la prueba transcurrió a notable ritmo desde los compases iniciales. Corredoras como la holandesa Nicole Steigenga (Doltcini-Van Eyck) y la eslovena Urska Pintar (Alé BTC) intentaron la aventura en solitario en los kilómetros iniciales de la prueba, pero sus escapadas no recibieron el visto bueno por parte de un pelotón en el que había muchos intereses claros de cara a la victoria final y pocas ganas de que la carrera se volviera loca. Probaron fortuna también Maaike Boogaard y Mavi García, ambas compañeras de equipo de Pintar, pero obtuvieron el mismo resultado.

Con el gran grupo perdiendo unidades de manera plausible con el paso de los kilómetros por el fuerte ritmo y la exigencia, la carrera llegó al momento de la verdad con muchas de las grandes favoritas manteniendo intactas sus opciones de victoria. A diez kilómetros para alcanzar la línea de meta, encabezaba la Durango-Durango un pequeño grupo de 17 corredoras. La mayoría de las miradas estaban enfocadas en Van Vleuten. Sus recientes resultados en Nafarroa dejaban claro que atraviesa un excelente momento de forma, lo que unido a su experiencia en esas situaciones de carrera hacían que fuera ella la principal rueda a vigilar. Poco le importó esa presión, pues a ocho kilómetros del final, en la última ascensión a Goiuria, abandonó la compañía de sus rivales para dirigirse en solitario hacia la victoria.

Casi todas asumieron el final que tocaba vivir, menos Anna Van der Breggen. La holandesa no fue capaz de seguir a la campeona mundial, pero mantuvo un interesante ritmo que le hizo albergar una mínima esperanza de volver a conectar con la cabeza de carrera, pero finalmente no tuvo más opción que enarbolar la bandera blanca. Annemiek Van Vleuten cruzó la línea de meta en solitario con los brazos en alto, la ciclista del Boels-Dolsman llegó 18 segundos después y Elisa Longo Borghini lo hizo a 1:05, haciéndose con la tercera posición y cerrando un podio final de auténtico lujo. La alemana Clara Koppenburg ocupó la cuarta plaza, mientras que Marta Cavalli, primera sub'23, fue quinta y dio tiempo al grupo principal en el que llegó la guipuzcoana Ane Santesteban, novena.

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