Bilbao - El prólogo de una final se escribe durante meses en un trabajo de resistencia que dibuja el entorno por el que transitan los contendientes. Las aristas de cada escenario confluyen después el Día D y en la Hora H. “No podemos empezar tarde”, se repiten Pablo Fusto e Iker Gordon como un mantra. El despertador tiene que sonar en el instante justo. El retrovisor golpea la fortaleza de su propuesta: les “cuesta entrar” en los partidos. En los dos duelos ante Dan Necol e Iñaki Urrutia, los precedentes de la final de la Liga Kutxabank de pala profesional, prevista para el sábado en el frontón Bizkaia de Bilbao, a partir de las 17.00 horas, pasaron por el trance de la remontada.
Localiza el argentino con claridad los problemas del salto al vacío: “Nos hemos juntado dos palistas a los que nos cuesta empezar”. Su compañero, por su parte, recita que “somos dos pelotaris que necesitan pelotear mucho. En este caso, la derecha de Necol evita eso. Puede ser mortal”. Así las cosas, las dos contiendas de la liguilla clasificatoria comenzaron cuesta arriba: 0-2, pero se alargaron hasta la quinta manga. No es mala señal. Eso sí, cada binomio se llevó un envite. Los colorados, quienes se clasificaron para la final de manera directa por el tanteo personal, empatados a puntos con sus adversarios y con los semifinalistas Gaubeka-Ibai Pérez, aterrizan el sábado tras dos semanas sin jugar. “Por haber liderado la clasificación no nos consideramos favoritos. El campeonato ha sido muy parejo, pero estamos contentos por cómo hemos jugado. Eso nos tiene que dar confianza”, analiza el bonaerense. Sus opciones pasan por arrimar el partido a la “pared izquierda”.
Entre el material, la resistencia de Urrutia y la diestra de Necol transitan las pesadillas de Fusto-Gordon. Las pelotas “vivas” y con “bastante bote” de los azules buscan escorar al delantero y que el pegador de Dax pueda romper con “el misil” que tiene en la derecha. Aun así, los cuatro protagonistas auguran una final “dura, larga y física”.
Una final a cinco jokos “Nos decantamos por dos pelotas vivas para evitar a Fusto y por otra más dura para tratar de cambiar el juego”, determina, por su parte, el puntillero campeón del Mundial de Barcelona. “Vienen bien para nuestro patrón de juego”, admite Necol, que da miedo con su derecha. “Tengo confianza en ella y mi objetivo es meter ritmo. Aun así, creo que la final será dura y seguro que vamos a llegar a los cinco jokos. Lo más importante es que hagamos pareja. Si es así, ganaremos”, desbroza el pelotari de Dax.
Asimismo, Urrutia, que vive su segunda final en el campo profesional -ambas con Necol-, augura que es “frío” en los compromisos importantes. “No me suele afectar la presión”, certifica el zaguero de Armintza. “Siempre que juega Fusto, el objetivo es superarle: o por arriba o haciéndole botar la pelota a los pies. La clave para conquistar la txapela también puede pasar por la derecha de Necol”, cuenta el guardaespaldas. “Dan y Pablo son dos delanteros que entran mucho en juego. El que mande será el que se lleve el gato al agua. Si Fusto marca la pauta con la zurda, tendremos muchas dificultades”, advierte el joven vizcaino. “Empecé la Liga Kutxabank junto a Necol con muchas ganas, porque es un pelotari con el que siempre he jugado muy a gusto. Me siento con confianza. Estoy siendo regular y estoy en un punto bueno de juego”, desgrana Urrutia. “Haber jugado la semifinal no creo que influya en la final del sábado. Nos viene bien para rodarnos, pero no marcará la diferencia”, remacha.