bilbao - El montañero vizcaíno Alex Txikon volverá a intentar la ascensión invernal al Everest (8.884 metros) sin ayuda de oxígeno artificial, una gesta que ya trató de alcanzar sin éxito el pasado año, en una expedición que iniciará mañana y espera finalizar “a finales de febrero”.

Txikon desveló el pasado jueves en Bilbao algunos detalles de este nuevo intento que según comentó el vasco, solo lograron en invierno los polacos Krysztof Wielicki y Leszek Cichy, en 1980, aunque en su caso utilizando oxígeno embotellado en la subida a la montaña más alta del mundo.

El lemoarra se apoyará “en un grupo muy reducido de colaboradores” entre los que estará el pakistaní Alí Sadpara, que ya le acompañó en 2016 en la exitosa subida invernal, también sin oxígeno, al Nanga Parbat (8.125 metros).

El alpinista aseguró que, en base a la experiencia del pasado año, van a tratar de realizar un “alpinismo controlado” y de “minimizar riesgos” dentro de una durísimas condiciones que en esta época pueden enfrentarles a temperaturas mínimas de 60 grados bajo cero y vientos de hasta 150 kilómetros por hora.

Los expedicionarios tienen previsto iniciar la marcha de aproximación el día 26 para alcanzar el campo base del Everest “entre el 1 y el 3 de enero” y a partir de esa fecha iniciar la aclimatación y “analizar la situación”.

“Trataremos de no meternos tanta carga. Será clave no trabajar nueve días seguidos, como el año pasado, y desgastarnos menos en las cotas mas bajas para guardar fuerzas para arriba”, subrayó Txikon.

El montañero también habló sobre las situaciones peligrosas que una montaña de estas características puede entrañar, reconoció que “el principal peligro”, el que “disminuye las opciones” de éxito, será el viento.

El equipo de Txikon filmará la expedición completa con la intención de “transmitir el lado más humano” del viaje “y tratar de conseguir que el espectador llegue a sentirse parte de la odisea.” - Efe