Vitoria - El atletismo alavés está de luto y sigue en estado de shock por el fallecimiento de Roberto Ruiz, un clásico de las carreras populares dentro del territorio desde finales del siglo pasado y en su día considerado también uno de los mejores atletas de fondo de Euskadi con cinco títulos (3 en Maratón y 2 en Media). El pasado domingo perdió la vida en extrañas circunstancias mientras circulaba en bicicleta por la A-3212, concretamente la zona de Navaridas. Antes de un almuerzo familiar en La Rioja, su corazón dejó de latir siendo encontrado su cuerpo tendido sobre el asfalto por un particular que avisó de urgencia al SOS Deiak. Los intentos de reanimación fueron en vano y se determinó su fallecimiento en el mismo lugar de los hechos.

Todavía no se conoce el informe del forense tras la autopsia que se le practicó ayer, pero algunos indicios apuntan ya con claridad a que pudo fallecer por muerte súbita. De esta forma, se descartaría por completo la hipótesis de una caída o un atropello como causa del trágico suceso, algo que ha provocado la consternación de familiares, amigos y atletas. Al margen de sus innumerables gestas a nivel deportivo, su rostro era muy conocido en Vitoria porque trabajaba desde hace tiempo como comercial de una conocida compañía telefónica, lo que le obligaba a frecuentar muchos lugares enfundado en el traje y corbata.

Las reacciones a la impactante noticia no se hicieron esperar en la jornada de ayer. Roberto Ruiz, ganador en varias ocasiones de la Media Maratón de Vitoria, ya no hacía tantos kilómetros en los últimos tiempos a raíz de un accidente de bicicleta que sufrió hace años bajando un puerto habitual del Tour de Francia. Desde entonces, sufría problemas en la cadera y estaba más concentrado en la formación de jóvenes talentos del Club La Blanca.

“Era un tío que amaba el atletismo y un gran corredor. No le gustaba chupar rueda y los rivales sabían que tenían que correr mucho para ganarle. Recuerdo que empezó en Manuel Iradier y luego se metió en nuestro grupo de El Prado para preparar las carreras de larga distancia”, explicaba ayer Patxi Hernández. Para Félix Resa, secretario de la Federación Alavesa de atletismo, la noticia también ha sido un mazazo. “Era muy querido en nuestro deporte. Le dio un gran empujón a las carreras populares junto a Gontzal Sanz y Alberto Ibáñez. Era una persona recta y estricta, tanto en su faceta profesional como humana”, destacó otro buen conocedor suyo.

La desolación en estas últimas horas es si cabe mayor dentro del Club La Blanca, donde ejerció como presidente durante el trienio comprendido entre 2012 y 2015, al margen de haber sido el responsable de sus equipos de cross y ruta durante siete años. También fue su directivo y su representante en los Campeonatos de España. Prueba de su entrega absoluta al deporte era de igual modo su colaboración con la Sociedad Excursionista Manuel Iradier en la preparación de la Vitoria-Estíbaliz.

“Últimamente ya no corría tanto ni le metía la caña de otros tiempos, pero seguía haciendo deporte a otro nivel. Estaba muy involucrado con los grupos de running y también muy contento por el hecho de que el club había ganado el Campeonato de España de Media Maratón y Montaña en categoría femenina, algo para lo que había luchado de forma denodada”, recuerda Mikel García, con quien mantenía una estrecha amistad desde hace décadas.

Tal y como confirmó su familia, el funeral por Roberto Ruiz tendrá lugar mañana a las 19.30 horas en la Iglesia Parroquial La Coronación de Nuestra Señora, ubicada en la calle Eulogio Serdán.