La tradicional cita navideña que en esta ocasión albergará San Mamés volverá a poner a prueba a Euskal Selekzioa, que espera contar un año más con el incondicional apoyo de una afición “generosa” y “participativa”, en palabras de José Mari Amorrortu (Bilbao, 22-VII-1953), que muestra su satisfacción por disponer de jugadores de primer nivel.
Euskal Selekzioa-Túnez. ¿Qué le transmite el partido a priori?
-Es una cita tradicional para nosotros y siempre la afrontamos con responsabilidad, intentando preparar el partido en cuestión de la mejor manera posible para seguir dando pasos hacia adelante. En cuanto a Túnez, sabemos que tiene unos números muy buenos en defensa y que es un equipo muy compacto. Vienen, además, con la idea de preparar la Copa de África, por lo que ellos también afrontarán el encuentro con mucho interés.
Será su séptimo encuentro al frente de la tricolor desde que asumiera el cargo junto con Mikel Etxarri en octubre de 2011. ¿Qué significa para usted dirigir a la selección?
-Para mí es un orgullo representar a Euskadi junto con Mikel. El día del partido es especial, muy bonito y emocionante, en el que te vienen a la cabeza muchos recuerdos.
¿Le gustaría continuar muchos años?
-No lo sé. También hay que pensar que uno no puede estar en los sitios eternamente, pero no he pensado más al respecto. Siempre lo valoro después de los partidos y todavía no quiero que me venga a la cabeza ese pensamiento.
Solo ha perdido un partido y fue en su debut contra Túnez, curiosamente. ¿Cómo recuerda aquel choque de 2011?
-Fue un estreno un poco triste y amargo. Hicimos un juego bastante bueno y generamos bastantes ocasiones de gol, pero no tuvimos acierto y nos ganaron al final. Fue un estreno un poco triste y amargo.
¿Espera un partido similar mañana?
-Por los datos que tenemos, vamos a encontrarnos de nuevo con un rival que destaca por su estructura defensiva, por lo que nos va a costar, pero tenemos mucha confianza en este grupo de jugadores y espero que tengamos el acierto que no tuvimos aquel día, que hagamos un buen partido y que nuestra afición disfrute, siendo una jornada festiva en la que toda la gente se aúne. En definitiva, que sigamos progresando en estos partidos, porque es bonito mantener esta ilusión.
¿Cómo van a repartir los minutos?
-Jugarán los 22 jugadores convocados, once en cada parte. Es la idea que tenemos y lo que hemos hecho hasta ahora.
Túnez jugó ayer en Catalunya, pero el choque de mañana es muy importante para ellos. ¿Lo sabe, verdad?
-Sí, somos plenamente conscientes de ello. En 2011 dejaron aquí un muy buen recuerdo y mañana estarán con sus mejores futbolistas, porque para ellos es un encuentro de gran responsabilidad. Será un partido muy competido.
Euskal Selekzioa también contará mañana con casi todos los pesos pesados.
-Así es. Hay algunos jugadores como Williams y Zurutuza a los que no hemos llamado al tener alguna molestia o carga física debido a la exigencia de la competición y nos hubiera gustado tener representación de Osasuna. Tampoco han podido venir futbolistas de otras ligas, pero vamos a preparar dos buenos equipos para este partido.
¿A qué jugadores de Osasuna habrían citado en caso de estar en condiciones?
-Roberto Torres nos llamó para decir que le gustaría participar, pero que no podía al estar con algunos problemas y lo mismo pasó con Álex Berenguer, en el que también habíamos pensado.
¿Es un privilegio aun así contar con futbolistas de la talla de Aduriz, Oyarzabal, Iñigo Martínez, Xabi Prieto o San José?
-Cuando estoy el día antes entrenando con ellos siento una sensación difícil de explicar, porque ves que son jugadores de primer nivel que entrenan con muchas ganas y que dan todo lo que tienen al estar deseando jugar con la selección. Para un seleccionador, imagine lo que supone.
También hay cantera. Futbolistas como Villalibre, Kepa o el citado Berenguer vienen pegando fuerte.
-En este momento, el fútbol vasco está viviendo un momento muy bueno y positivo, con jugadores jóvenes que están llamando a la puerta y entrando en la competición con mucha fuerza, haciendo frente a una gran competencia en sus equipos. Para todos los técnicos y gente de club que están en el trabajo de cantera, ver que la selección está representada con jugadores de este nivel es importantísimo.
Además, apuntaba antes que el compromiso de los seleccionados es más que elevado.
-Sí, es absoluto. Están deseando que llegue el partido para jugar con la selección, aunque pocos días después tengan que afrontar otros encuentros de primer nivel con sus respectivos equipos.
Luis Mari Elustondo dijo el martes a este periódico que la tricolor se clasificaría seguro para un Mundial. ¿Lo corrobora?
-Creo que lo he dicho en alguna ocasión, que Euskadi tiene un potencial de primer nivel. Con eso está todo dicho. Se puede reunir un grupo de jugadores que está compitiendo a un altísimo nivel en sus ligas, por lo que seríamos una selección muy fuerte.
¿A qué rivales cree que podrían hacer frente con plenas garantías? ¿A cualquiera?
-Sí, particularmente creo que competiríamos al máximo a cualquier nivel y ante cualquier equipo.
También en una Eurocopa o Mundial, por tanto.
-Sí, sin ninguna duda.
¿Qué daría por dirigir a sus futbolistas en un torneo de tal magnitud?
-No solo yo, cualquier compañero que pueda tener la oportunidad de estar con su selección en eventos oficiales lo vive como algo especial. Espero que en nuestro caso sea muy pronto, sería muy emocionante.
¿Confía en lograr la oficialidad en un futuro más o menos cercano?
-Hay muchas gestiones internas y no estoy al tanto de todos los detalles, pero tanto la federación como las instituciones están trabajando para que se pueda dar. Sería algo maravilloso para todos.
Un paso previo es poder jugar en fechas FIFA. Podría darse la circunstancia el próximo mes de marzo, en lo que también trabaja la federación.
-Me consta que está más avanzado. Nuestro presidente, Luis Mari Elustondo, y Jon Redondo, en el Gobierno vasco, están trabajando en esa línea y nos daría la posibilidad de dar un paso adelante en ese sentido.
Hasta que se consiga la ansiada oficialidad habrá que alentar a Euskal Selekzioa en cada cita. ¿Espera un gran ambiente mañana en San Mamés?
-Sí, ya lo vimos cuando jugamos contra Catalunya o Perú en Bilbao. El público de la selección es muy generoso, muy participativo, y la gente joven siempre se vuelca. En los momentos previos al inicio del partido, sobre todo, se forma una atmósfera muy emotiva.
¿Qué mensaje transmitiría a la afición para que acuda en masa al campo?
-Nuestro mensaje es que se sumen a este partido y que lo sientan como lo sentimos nosotros. Con eso es suficiente, porque la gente está con muchas ganas de ver a su selección.
En cuanto a la salud que presenta el fútbol vasco, nadie puede discutir que es envidiable. Cinco clubes en Primera.
-Es una realidad y es producto de la coherente, responsable y productiva gestión de todos los clubes, lo que siempre ha sido la referencia de Euskadi en todos los órdenes, tanto en el deportivo, como en el social y económico.
Más allá de los clubes, ¿diría que estamos ante una de las mejores generaciones de futbolistas vascos?
-Es difícil hacer una comparación, porque jugadores vascos ha habido, hay y habrá muy buenos, porque el futuro también lo veo muy esperanzador. Dicho esto, es verdad que estamos viviendo un momento muy importante tanto a nivel de clubes, como de jugadores, lo cual es para felicitarse.