El Sky, el equipo más metódico del pelotón, el que impulsó el uso de los potenciómetros, continúa con su tiranía en las últimas ediciones del Tour de Francia. Fundado en 2010, con una base de ciclistas formados en pista, el conjunto británico logró su primera gran victoria en la ronda gala de 2012 de la mano de Bradley Wiggins. Gesta que repitió en 2013 con Chris Froome, que llegó nuevamente de amarillo el domingo a los Campos Elíseos. Seis participaciones y tres triunfos. Casi nada. Además, el rendimiento de sus corredores, máquinas perfectamente diseñadas para asistir a su líder en cualquier terreno, ha vuelto a ser destacado. Un hecho, eso sí, que no sorprende a Joseba Beloki. El gasteiztarra, que asume su sorpresa porque en el nueve del Tour faltaran hombres de la talla de Mikel Nieve o David López, que hubiesen ayudado a Froome en la alta montaña, admite que “se lo tomaron bien”. “Fue una pena, pero los que han ido han rendido bien. Eso sí, se han desmoronado un poco al final”, advierte.

Y es que además del propio ciclista británico de origen keniano, han sobresalido las figuras de Peter Kennaugh, fantástica su primera semana, especialmente en las etapas llanas, Richie Porte o Geraint Thomas. “Hoy en día ningún equipo deja las cosas al azar, menos aún el Sky. Han alternado las órdenes entre sus corredores. Por ejemplo, Porte hizo una fantástica subida a la Pierre de Saint-Martin y luego Geraint Thomas o Wout Poels han aparecido en las etapas alpinas. Desarrollan corredores muy completos, que pueden ganar una París-Niza o una Vuelta al País Vasco, pruebas de una semana, y luego ruedan de maravilla en el Tour”, analiza Beloki.

El excorredor, que sufrió en sus carnes la tiranía de Lance Armstrong, que le superó en tres ediciones de la ronda gala de manera consecutiva, ve notables diferencias entre aquel US Postal y el Sky: “Son dos estilos distintos. Lance se rodeó de buenos corredores, como Heras o Rubiera, pero el resto de ciclistas los escogía exclusivamente para el Tour, algunos muy veteranos. El equipo británico funciona de otra manera, pues tiene un bloque que tiene buenos resultados a lo largo del año en otras carreras”.

Pero a pesar de que el Sky ha terminado por lograr el objetivo con el que partió de Utrecht el pasado 4 de julio, insiste Joseba Beloki que el “equipo se ha desmoronado”. “Los ataques les han hecho daño y se ha visto que Froome iba a menos, al contrario que Nairo. Por las imágenes que hemos visto, quizá en la etapa del Glandon, con final en Saint Jean de Maurienne, el Movistar pudo haber hecho más. Tenían buenos corredores escapados y no supieron aprovechar el ataque de Contador a 72 kilómetros de meta”, expone el gasteiztarra, que cuenta en su palmarés con un segundo puesto y dos terceros en el Tour.

Eso sí, pese a la exhibición de Quintana en la subida a Alpe d’Huez, en la que demostró llegar con un plus más de fuerza que sus rivales, Beloki no cree que el colombiano hubiese podido ganar: “Froome llevaba todo el rato el control de la ventaja. La estaba administrando. Para eso tiene el potenciómetro, un dispositivo que le ha venido muy bien al ciclismo. Además, seguro que desde el coche le supieron mantener tranquilo para que no perdiese la cabeza. Además, creo que llegó un momento en el que Nairo ya solo pensaba en ir a por la victoria de etapa”.

Así es el método del Sky, uno de los equipos más potentes del pelotón. El control del ritmo, de las pulsaciones y del esfuerzo por encima de todo. Algo con lo que se topará Mikel Landa el próximo año. “Si se termina por confirmar, supondrá un gran cambio para él. Hay a corredores a los que se les hace complicado asimilar el salto al Sky”, explica Beloki.

froome, duda para la vuelta Por otro lado, Chris Froome admitió ayer que la opción de correr la Vuelta a España “está sobre la mesa”. “Sé que sería un desafío enorme ratificar esto con otra gran vuelta ahora, pero sí, está en mi mente, y quizá podría estar sobre la mesa”, añadió.