lezama - Dar un paso más hacia la oficialidad. Ese es el objetivo número uno de la Federación Vasca de Fútbol y por el que trabajan los dirigentes de la misma. Con ese propósito, como viene siendo habitual por estas fechas, la Euskal Selekzioa volverá a jugar esta noche un encuentro plagado de emociones y con una indudable carga política. San Mamés acogerá a partir de las 20.30 horas un encuentro reivindicativo que este año adquiere un cariz mayor como consecuencia del rival, una selección catalana que llega a Bilbao en un momento de importantes cambios en Catalunya. Es, pues, más que un partido. Y servirá también para poner el broche de oro a un fin de semana de reivindicación por la oficialidad que comenzó el ayer con los enfrentamientos de las selecciones femenina y de fútbol sala. Además, la presencia de Artur Mas en La Catedral, donde acompañará a Iñigo Urkullu -con quien está citado hoy en Ajuria Enea a las 13.15 horas- en el palco de honor, le otorga una mayor relevancia a la cita. Será también un choque conmemorativo del centenario de la tricolor, que disputó su primer encuentro el 3 de enero de 1915 ante Catalunya en la capital vizcaina.

Frente a frentá habrá dos selecciones cuyas Federaciones luchan por un mismo propósito: la oficialidad, pero que se encuentran de lleno con las trabas de la Española, que ni tan siquiera les permite jugar en fechas FIFA. Ese es, tal y como han apuntado recientemente Jon Redondo, director de Deportes del Gobierno vasco, y Luis Mari Elustondo, presidente de la Federación Vasca de Fútbol, el objetivo marcado para el 2015 que está próximo a llegar y por el que pelearán desde los despachos y el terreno de juego. Dos voces hacen más fuerza que una y es por ello que el choque de esta noche en San Mamés servirá para que la petición de la oficialidad resuene con más potencia.

Olvidados los incidentes de hace dos años en Anoeta, que obligaron a los agentes de la Ertzaintza a cargar en el interior del estadio donostiarra, la de esta noche se espera que sea una fiesta mayúscula. Si bien no parece que se vaya a colgar el cartel de “no hay billetes”, las gradas de La Catedral estarán prácticamente llenas. A ello ayudará también la presencia de 4.300 personas llegadas desde Catalunya. Todos ellos son ingredientes más que suficientes para que los asistentes a San Mamés disfruten de un encuentro de nivel ante una potente selección catalana que llega a Bilbao con todo, salvo con las ya conocidas ausencias de Víctor Valdés y los futbolistas que militan en la Premier League. Un grupo de jugadores liderados en el terreno de juego por la figura de Xavi Hernández y dirigidos desde la banda por Gerard López en el que destacan también Gerard Piqué, Sergio Busquets o Sergio García, campeones del Mundo y de Europa los dos primeros, y continental el tercero. Si bien sobre el verde no habrá tres puntos en juego, el partido servirá para medir el nivel que puede ofrecer la Euskal Selekzioa, que como Catalunya cuenta también con una plantilla competitiva, aunque José Mari Amorrortu y Mikel Etxarri no hayan podido contar con Xabi Alonso, Asier Illarramendi o César Azpilicueta, entre otros. Xabi Prieto, que vestirá esta noche por undécima vez la camiseta de la tricolor, capitanerá a un combinado con mayoría de jugadores del Athletic, un total de diez, y en el que también estarán representados la Real Sociedad, el Eibar y Osasuna. No así el Alavés, que el martes ya mostró su malestar por la ausencia de futbolistas de Araba en la lista de convocados. Merece mención especial la implicación demostrada por todos los convocados, algunos de los cuales han renunciado a días de vacaciones para estar presentes hoy en San Mamés.