Vitoria - Cuando a comienzos de los años 80, en plena movida madrileña, un grupo de rock local llamado Coz saltaba a la fama con su álbum Las chicas son guerreras, ninguna de las tres protagonistas de esta historia había nacido. Aquel grito de guerra reivindicativo que en aquella sociedad aún anclada al franquismo idearon Jesús Albéniz, Miguelo Jiménez y Juan Márquez, terminaría formando y acelerando con el tiempo, probablemente sin quererlo sus autores, una revolución imparable a partir de un derecho tan básico como la igualdad.
Tres hijas de aquella revolución conforman hoy las páginas de este reportaje. Todas ellas deportistas vitorianas de alto nivel a las que el éxito no acompaña en la misma medida que a sus colegas masculinos. Bien porque sus modalidades son, a veces, prácticamente desconocidas -véase el caso del curling-, bien porque el papel femenino en la sociedad actual aún continúa siendo incapaz de romper el techo de cristal de su entorno. Aunque las distancias se van acortando.
Así y todo, los avances son significativos y la presencia femenina ha dejado de ser algo casi residual para ir ganando terreno en los propios medios de comunicación y en los estamentos que gobiernan el deporte. Los casos de Tania Calvo, Itaso Conde e Irantzu García son la prueba de que el deporte femenino ha llegado para quedarse. Para derrumbar de una vez por todas los mitos y de paso los tópicos que muchas modalidades siguen arrastrando. Contra eso también saben competir estas tres vitorianas, todas con menos de 22 años y con un palmarés que invita al optimismo. Los últimos éxitos conseguidos dan una idea de lo que se viene. Tres medallas de bronce en sus respectivas carreras -ciclismo en pista, baloncesto y pista- que se suman a otros tantos triunfos en el pasado. No solo ya suyos sino también de otras colegas como Maite Zúñiga, Almudena Cid, Lorena Guréndez, Tania Lamarca o Vanessa Almeida, precursoras de un movimiento imparable para el que, lamentablemente, continúan faltando medios físicos y económicos. Si no, ahí está el caso de Irantzu García, una de las mejores jugadoras de curling del mundo que no tiene una pista de hielo homologada donde poder entrenar. Ni en Vitoria ni en ninguna otra capital del país. Solo Canadá parece estar preparada actualmente para un deporte minoritario donde casos como el de esta vitoriana no pueden sino entenderse como un milagro. Eso sí, la Federación Mundial de Curling analiza en estos momentos abrir la puerta olímpica a una de sus modalidades, la de dobles mixtos, algo que aliviaría el cabreo de Irantzu, que ahora mismo está más centrada en su carrera y sus prácticas de Medicina que en el tapiz helado. A sus 22 años y con 14 medallas de oro en los campeonatos de España -al margen del bronce logrado el pasado mes de abril en el Europeo de Escocia, la primera medalla que logra la selección en su historia-, la joven vitoriana apura estos días de vacaciones antes de acudir a finales de agosto a Praga para impartir un clinic a jugadores de curling menores de 21 años.
Talento encerrado Tampoco Tania Calvo lo ha tenido fácil hasta llegar a la elite del ciclismo femenino en pista. Encerrada en una suerte de urna de cristal que le impedía dar rienda suelta a su potencial, tuvo la osadía de poner rumbo a Mallorca hace ahora cuatro años gracias a una beca ADO (Ayuda al Deporte Olímpico), que le facilita todo lo necesario para preparar su gran objetivo: la clasificación para los Juegos de Río 2016. Entre tanto, en el velódromo mallorquín pule cada día su formidable talento a base de carácter, motivación y metodología, aspectos que desde una prudente distancia gestiona su entrenador, Salvador Meliá, un excorredor de pista también que augura para la alavesa un futuro brillante “si no se relaja”.
La benjamina del grupo es Itsaso Conde, de 17 años, jugadora del Araski y uno de los valores más prometedores del baloncesto femenino nacional. De momento en su haber cuenta ya con un oro en el europeo sub’16 de Hungría en 2012 y un bronce en la pasada cita europea de Portugal, esta vez en categoría sub’18. “Llegará lejos si las lesiones le respetan y mantiene la misma progresión que hasta ahora”, intuye su actual entrenadora, Madelén Urieta.