RIO DE JANEIRO. Los chilenos, liberados en la madrugada, ya fueron notificados de que tienen un plazo de 72 horas para salir del país antes de ser deportados de forma sumaria por haber violado el Estatuto del Extranjero, según un comunicado de la Policía Federal.

"Los datos (de identidad de los chilenos) fueron ingresados al sistema (informático) de inmigración de la Policía Federal junto con la advertencia del proceso, lo que impedirá que vuelvan a entrar a territorio nacional durante el Mundial en caso de que decidan regresar a Brasil", asegura el comunicado.

Según la Policía Federal, entre los chilenos detenidos había un menor de edad, cuyo padre también fue notificado de la necesidad de salir de Brasil.

La notificación fue estampada tanto en el pasaporte como en la tarjeta de entrada, que es el documento que las autoridades de inmigración de Brasil le entregan en la aduana a turistas procedentes de Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, países cuyos ciudadanos pueden ingresar a territorio brasileño sin pasaporte.

"Cualquier agente público, en el momento de conferir los documentos de los hinchas extranjeros involucrados en el incidente, sabrá hasta cuándo puede permanecer en Brasil. Si constatan que el plazo fue superado tienen que enviarlos a unidades de la Policía Federal para su deportación de forma sumaria", agrega la nota.

Los hinchas, que carecían de entrada para el partido, forzaron un cerco de seguridad e invadieron en estampida la sala de prensa del estadio en un intento de buscar una puerta de acceso a las gradas.

La mayoría de los hinchas, vestidos con la camisa de la selección chilena, fue detenida dentro de la sala de prensa, en donde no halló vía de escape hacia las gradas y en donde terminó rindiéndose sin ofrecer resistencia.

Los invasores rompieron un par de paneles para tratar de llegar al campo, al tiempo que tiraron por el suelo cámaras de televisión y material de la prensa presente en el recinto.