VITORIA - Parece que nadie quiere esta Liga. Los equipos con opciones de levantarla se han empeñado en dejarla en suspense hasta la última jornada. Descolgado ya definitivamente un Real Madrid que naufragó en Vigo (2-0) ante el Celta la Liga será para culés o colchoneros.
El Atlético no pudo ganar ayer en su estadio a un Málaga que buscaba con un empate la permanencia matemática en Primera. Mientras, su rival, el Barcelona que hace una semana daba por perdido el título, se empeñó en despreciarlo incapaz de marcar en Elche. Los ilicitanos lograban así seguir un año más en la Liga de las Estrellas y dejaban todo por decidir para el último partido.
Salió vivo el Barcelona, ya que Adrián tuvo en su pie derecho, en el minuto 92, el gol que habría hecho ayer campeón al Atlético cuando el árbitro ya había señalado el final en el Martínez Valero. Willy Caballero se ocupó de convertir la última jornada en una auténtica final de Liga.
El Atlético llega como el mejor estudiante del curso y, a modo de premio al trabajo realizado, cuenta con el empate como resultado a su favor. Los culés, inmersos en un año largo y tortuoso, continuación del anterior, se presentan en su estadio en la última fecha con todo a su favor para llevarse una Liga que han tirado en demasiadas ocasiones.