castelldefels. El ciclista francés Warren Barguil, del Argos-Shimano, se impuso en la decimotercera etapa de la Vuelta a España, disputada este viernes entre la localidad tarraconense de Valls y la barcelonesa de Castelldefels sobre 169 kilómetros, mientras que el italiano Vincenzo Nibali (Astana) sigue como líder de la clasificación general de la carrera.
El joven ganador, de 21 años y vencedor del Tour de Porvenir en 2012, fue el más listo de la fuga del día, y sorprendió a todos sus rivales, algunos de ellos con más experiencia, para hacerse con un triunfo de prestigio, su primero como profesional, y ante rivales de calidad.
Fue una nueva jornada de transición, con los favoritos guardando fuerzas de cara a afrontar tres etapas de mucha dureza. Ni siquiera la presencia de un puerto de primera categoría antes de afrontar el tramo final ni el empinado final en la meta de Castelldefels alteró la tranquilidad que reinó todo el día. De este modo, el recorrido se prestaba a premiar a los 'aventureros' a la caza de un botín preciado. Sin embargo, la escapada que sería la gran protagonista de una soleada jornada no se formó hasta casi la mitad del recorrido, después de varios y numerosos intentos.
La que funcionó definitivamente fue la formada, además de por Barguil, por Scarponi (Lampre), Nocentini (AG2R), Santaromita (BMC), Coppel (Cofidis), Beñat Intxausti (Movistar), Bauke Mollema (Belkin), Amets Txurruka (Caja Rural) y los navarros Egoi Martínez (Euskaltel) y Xabier Zandio (Sky), que fueron los que sobrevivieron a la inicialmente compuesta por el doble de ciclistas pasados los 70 primeros kilómetros.
De todos, los nombres de Intxausti, Scarponi y Mollema se presentaban como los más peligrosos, e incluso el italiano lo intentó en solitario, pero tras superar el Rat Penat prefirió esperar a sus compañeros. En Castelldefels empezaron los ataques y el nerviosismo, traducido en la caída de Intxausti, sin consecuencias pero que le dejó sin opciones. Cuando se atisbaba el duro último kilómetro, Barguil atacó con fuerza para llevarse el premio.
Hoy se disputará la primera de las duras etapas pirenaicas, que terminará en el inédito puerto de la Collada de la Gallina, de primera categoría.