lLEGA a los mercados europeos una nueva generación del Seat León, que es como decir que la firma española actualiza su modelo estrella, con todo lo que ello implica. Si el Ibiza marcó el camino y el Toledo, desde su planteamiento más amplio en cuanto a destinos comerciales y sensibilidad anticrisis, consolidó la tendencia de Seat, el León confirma la solidez de la apuesta del Grupo Volkswagen por la firma ubicada en Cataluña. Y eso, para los que vivimos del y por el automóvil, es una magnífica noticia.
No hay más que abrir el dossier de prensa, visualizar las imágenes de este León o repasar los equipamientos y precios de la nueva gama del compacto para percatarse de que esta nueva edición va a ser un éxito, sin ningún género de dudas. Tal vez no posea una estética tan espectacular y rompedora como la del anterior León -en opinión de este redactor, el compacto más bello del mercado en su momento-, pero en todo lo demás es simplemente irreprochable. Y es que lo tiene todo: belleza exterior, elegancia, estilo deportivo, mayor espacio interior, una dotación en confort, seguridad y conectividad a la última, motores eficientes y poderosos, precios ajustados y hasta un amplio maletero.
El punto de partida es una carrocería de cinco puertas que progresa en todos los sentidos, siendo más compacta (5 centímetros más corta) y aportando mayor batalla (6 centímetros más) y anchura de vías. Para comenzar, las cotas se sitúan en 4,26 metros de largura, 1,81 de anchura, 1,46 de altura y 2,63 de distancia entre ejes, con un espacio de carga de 380 litros, 39 litros más que su predecesor.
Desde un punto de vista global, Seat destaca del León su "magnífico diseño emocional, la incorporación por primera vez en el segmento de faros integrales de leds -opcionales y con regulación automática de la altura para no deslumbrar-, la presencia de tecnologías innovadoras al servicio de la seguridad y la conectividad, una eficiencia ejemplar gracias a la reducción del peso -que llega a ser de hasta 90 kilogramos- y a unos motores con lo último en tecnología, la superior rigidez del bastidor -crece en un 15% gracias al empleo de aceros de alta resistencia- y la introducción de sistemas innovadores de infoentretenimiento". Todo ello en un turismo fabricado en Martorell del que ya se han vendido en sus dos anteriores generaciones aproximadamente 1,2 millones de unidades, y que se ha caracterizado por "el placer de conducir un coche altamente funcional" y que ahora en palabras de la marca española "destila toda la fuerza y emoción de su personalidad", además de mejorar su habitabilidad, ergonomía, confort, la calidad y el montaje de los materiales y su equipamiento para acercarse a los mejores modelos del segmento Premium.
Otro apartado en el que el León será brillante es el de su comportamiento dinámico, como cabe esperar de un ejemplar de gran tradición deportiva. La elevada rigidez de la carrocería, la presencia de numerosos sistemas electrónicos de ayuda a la conducción -ABS, ASR, autoblocante electrónico, ESP, tres modalidades de conducción (Eco, Confort y Sport), detector de somnolencia, asistente de luces y control de carril, entre otros elementos-, el esquema de suspensiones (MacPherson delante y barra de torsión en la zaga, con la suspensión multibrazo reservada para potencias superiores a los 150 CV, aquí Seat ha buscado ahorrar costes) y los motores de 1,2 a 2 litros y potencias entre 86 y 184 CV garantizan una respuesta de lo más satisfactoria y estimulante.
TURBO PARA TODOS El nuevo León apuesta, siguiendo las tendencias del Grupo Volkswagen ya vistas en los recientemente lanzados Audi A3 y VW Golf, por las mecánicas sobrealimentadas, todas con inyección directa, sistema de parada y arranque automáticos (salvo el 1.6 TDI de 90 CV), consumos que se reducen hasta en un 22%, tracción delantera y emisiones medias de CO2 por debajo de 120 gramos por kilómetro, lo que le exonera del tributar por el Impuesto de Matriculación. A destacar la variedad de cajas de cambios, con mecanismos manuales de cinco y seis marchas, y las automáticas DSG de doble embrague con seis y siete relaciones.
De entrada contará con cuatro motores de gasolina: dos 1.2 TSI, el primero con 86 CV, 160 Nm de par máximo, 178 km/h de velocidad máxima, 11,9 segundos de 0 a 100 km/h y 5,2 litros de consumo medio, y el segundo con 105 CV, 175 Nm, 191 km/h, 10,1 segundos acelerando y 5,2 litros de gasto promediado; en tanto que los 1.4 TSI se ofertan también en dos niveles de rendimiento, el primero con 122 CV, 200 Nm, 202 km/h, 9,3 segundos de 0 a 100 km/h y 5,2 litros de consumo medio, mientras el más potente se va a 140 CV, 250 Nm, 211 km/h, 8,2 segundos acelerando y 5,2 litros de gasto en recorrido combinado.
Los diésel recurren a los conocidos 1.6 TDI y 2.0 TDI. Los 1.600 se presentan en dos escalones, el primero con 90 CV, 230 Nm, 178 km/h, 12,6 segundos de 0 a 100 km/h y 4,1 litros de consumo medio, dejando al segundo en 105 CV, 250 Nm, 191 km/h, 10,7 segundos acelerando y 4,1 litros de gasto promediado. Los 2.0 TDI parten de inicio con 150 CV, 320 Nm, 215 km/h, 8,4 segundos de 0 a 100 km/h y 4,4 litros de consumo medio, en tanto que el 2.0 TDI más potente brillará con sus 184 CV y 380 Nm de par máximo. Asimismo, en el primer trimestre de 2013 se sumarán las mecánicas de los 1.8 TSI de 180 CV manual y DSG y las versiones con caja DSG de los 1.2 TSI de 105 CV, del 1.6 TDI CR de 105 CV y del 2.0 TDI CR de 150 CV.
Por último, los precios de la gama León, disponible en cuatro acabados (Emotion, Reference, Style y FR), se sitúan entre 14.990 y 25.700 euros, con los gasolina 1.2 TSI de 86 CV entre 14.990 y 17.570 euros, los 1.2 TSI de 105 CV de 18.220 a 19.820 euros, los 1.4 TSI de 122 CV de 20.330 a 21.790 euros, y los de 140 CV de 20.870 a 22.330 euros. Los diésel 1.6 TDI fluctúan entre 17.720 y 21.900 euros, mientras los 2.0 TDI de 150 CV van de 23.250 a 24.710 euros, quedando el 2.0 TDI de 184 CV en 25.700 euros.
Como apunta el presidente de Seat, James Muir, "con el nuevo León sabemos que tenemos un coche que ofrece a nuestros usuarios una respuesta emocional y racional a sus necesidades, una combinación irresistible de diseño, tecnología, rendimiento y acabados de calidad destinada a seducir a nuestros clientes y también a atraer a una nueva generación de consumidores a la marca Seat". Lo dicho: toda una declaración de principios.