a coruña. A perro flaco, todo son pulgas. Eso debió de pensar anoche Riazor, que volvió a ver -y ya van demasiadas- una uneva derrota de su equipo, que no levanta cabeza en su vuelta a primera división. Marchena e Ighaló pusieron los dos primeros goles del Granada. Un penalty en los últimos compases le privará al Dépor de Manuel Pablo, que jugó demasiado con la paciencia del árbitro, y aumentó el castigo del Dépor, cuya afición despidió ayer por primera vez a su equipo con intensos gritos de Lendoiro dimisión encarándose al palco pañuelo en mano. Foto: efe