Vitoria. "Algo hemos rascado", dice Igor Antón cuando reposa el pulso en el Boulevard de Donostia, tras la Clásica. De lo que habla el vizcaino, a punto para su enésimo ataque a la Vuelta -¿el definitivo?-, es de algo tan alejado del romanticismo ciclista como un resultado, undécimo tras meter codos y multiplicar vatios en el sprint, que no hubiera significado nada, ni una mención, ni un comentario, si no fuera porque fue el primer ciclista vasco en la carrera guipuzcoana y, sobre todo, porque esa posición suma algún punto, no muchos, en la carrera frenética de Euskaltel-Euskadi por mantenerse en el World Tour. Para eso, necesita resultados, puntos, en el tramo final de la temporada que arranca este sábado en Iruñea con la Vuelta a España y que el equipo vasco correrá con la calculadora en la mano.
Trata de cuadrar, de todas maneras, unos números imposibles.
En el conjunto naranja conocen que a día de hoy el Ranking de Mérito, ese esperpento indescifrable ideado por la UCI no se sabe muy bien para qué fin, les sitúa fuera del World Tour. Y asumen como "muy improbable" la posibilidad de que el equipo pueda escalar a una de las 15 primeras posiciones que aseguran la permanencia en la élite del ciclismo. De momento, según la clasificación elaborada por Fran Reyes para la web revolutio.es y con fecha del 25 de julio, Euskaltel-Euskadi estaría situado en el puesto 17, con 395 puntos, a casi 200 del 15º, que es el FDJ francés. Teniendo en cuenta los primeros refuerzos de algunos equipos que luchan por ascender en el ranking, el paisaje sería aún más preocupante: el equipo vasco cae hasta la 19º plaza y roza la pérdida de categoría que se sitúa dos plazas más atrás, ya que solo los 15 primeros se quedan de manera matemática en el World Tour, mientras que los cinco siguientes, del 16 al 20, se someten al veredicto subjetivo de la Comisión de Licencias por el que ya pasó el equipo hace un año con resultado satisfactorio, lo que no es tan sencillo que se vuelva a repetir.
"El riesgo de perder la categoría es inminente", dicen desde Euskaltel, mientras asisten con preocupación a movimientos estratégicos como el del Saxo Bank, que ya ha firmado al número 1 del ranking europeo continental, lo que supone un buen saco de puntos, o a la renovación casi total de la plantilla del Ag2r. Es en lo que se ha convertido el ciclismo: lo que no se gana en la carretera, se puede lograr en los despachos. "Y en esa guerra nosotros no podemos competir con equipos como el Saxo Bank (20 millones de presupuesto) el Argos (15 millones) o el Ag2r (13), a los que sí nos medimos de igual a igual en la carretera", explican alarmados desde el conjunto naranja, más concienciados que nunca
Misión imposible La carretera, lo que queda de temporada, es otra evidencia, no le dará a Euskaltel-Euskadi una plaza en el próximo World Tour. "Se podría soñar, pero...". Ni siquiera soñando. Ni un final de año extraordinario, fuera de lo común, antológico, le daría al equipo el impulso para escalar lo suficiente como para no tener que acudir al careo con la UCI. Euskaltel necesita, aproximadamente, 350 puntos, el doble de los que ha conseguido hasta ahora, para lograr esa hazaña, cuando en juego habría no más de 700 puntos contando también la revisión final de las diferentes clasificaciones que establece la UCI. Vamos, que ni arrasando.
Más representativo de la que esa ensalada de cálculos es saber que en la pasada Vuelta, Juanjo Cobo, ganador de la general y una etapa, sumó 87 puntos; o que a Euskaltel no le serviría para nada hacer en la carrera española lo que hizo el Sky en el Tour (primero y segundo en la general, seis etapas...).
Pese a la dificultad extrema de la operación, el equipo vasco ha diversificado la plantilla dejando a Antón y Astarloza en la pelea por los puntos de la Vuelta -"Igor correrá más que nunca con la calculadora sabedor de que tiene que sumar puntos", dicen-; y reservando a Mikel Nieve, Samuel Sánchez y los hermanos Izagirre, entre otros, para cubrir el resto del calendario y las apetitosas clásicas canadienses, Lombardía y, ya en los estertores de la temporada, las vueltas chinas que la UCI valora como el oro.
fichar, sí o sí Aún así, no cabe rendirse, claro, el conjunto vasco asume que la única manera de mantenerse en el World Tour es fichando a corredores con puntos. "La pelea por los puntos se ha complicado mucho en los últimos años. Hace tres, por ejemplo, con 420 eras 16º en la clasificación, mientras que ahora necesitas 600 para estar en la misma posición". La actual plantilla de Euskaltel no alcanza para tanto. Solo tres corredores tienen a fecha de hoy más de veinte puntos (Samuel, Nieve y Antón), mientras que diez corredores del Movistar o quince del RadioShack superan esa cifra. Del resto de ciclistas vascos que corren en equipos extranjeros, solo Intxausti y Zubeldia están a esa altura. Un imaginario equipo compuesto por los 12 corredores vascos mejor clasificados en el Ranking de Mérito, llegaría hasta los 473 puntos.
Ni eso da para entrar en el World Tour, la prioridad absoluta del nuevo proyecto de Euskaltel-Euskadi que presentaron hace unas semanas Alberto García Erauzkin, presidente de la empresa vasca, e Igor González de Galdeano, mánager del equipo.