Vitoria. Dos de los favoritos a la victoria final en Roland Garros, Novak Djokovic, número uno del mundo, y Roger Federer, el tercero, solventaron su pase ayer a la siguiente ronda del torneo galo.

Djokovic sufrió la prueba más dura este año en Roland Garros al necesitar cinco sets y cuatro horas y 18 minutos para doblegar al italiano Andreas Seppi, por 4-6, 6-7 (5), 6-3, 7-5 y 6-3, en los octavos de final. El serbio, semifinalista el pasado año, cedió los dos primeros sets ante el verdugo del español Fernando Verdasco, y superó una situación complicada en el cuarto cuando estuvo 5-5.

Hasta esta ronda, Djokovic no había cedido un solo set, pero ahora son los españoles Rafael Nadal, Nicolás Almagro y David Ferrer, los únicos que se mantienen imbatidos en ese aspecto. Seppi, que nunca había ganado a Djokovic en los siete encuentros anteriores, demostró la garra con la que salvó seis puntos de partido ante el suizo Stanislas Wawrinka en Roma, pero al final su físico le pasó factura. Contra Verdasco estuvo tres horas y 23 minutos de lucha.

Por su parte, Roger Federer continúa vivo en su carrera por conquistar el torneo francés, tras derrotar al joven belga David Goffin (5-7, 7-5, 6-2 y 6-4), en un partido de cuarta ronda en donde el suizo dejó escapar el primer set.

Federer, que ha cedido siempre un set en esta edición de Roland Garros, llegaba a la pista con el objetivo de poner fin al sueño del debutante Goffin. Nada más lejos de la realidad, ya que el belga daba la sorpresa y se adjudicaba la primera manga tras aprovechar el despiste del suizo en el undécimo juego y romper, de esta forma, el saque a su rival.

Con hasta 17 errores no forzados en este primer tramo, Federer decidió hacer borrón y cuenta nueva y se lanzó hacia la remontada. Ya en el segundo set, Goffin no dejaba de sorprender a propios y extraños, golpeando la bola con mucha soltura ante un suizo incómodo. Sin embargo, el campeón en 2009 le devolvió la jugada del primer set al belga, adjudicándose la segunda manga por 7-5.

Empatado el encuentro, Federer puso la directa y subió el porcentaje de su primer saque mientras bajaba el de errores. Los nervios del debutante comenzaron a aflorar. Pese a su descaro, Goffin fue vapuleado y, en un visto y no visto, el tercer set voló. En menos de media hora. Así, comenzó la cuarta y definitiva manga del encuentro con la misma autoridad suiza que se vio en la tercera. Goffin tuvo su momento de gloria con dos muy buenas dejadas, aunque de poco sirvieron finalmente. Federer tuvo paciencia y acabó llevándose el partido en cuatro sets, alcanzando así los cuartos de final del torneo más prestigioso sobre tierra batida.

La sorpresa saltó en el cuadro femenino. La tenista número uno del mundo y máxima favorita a la victoria final, la rusa Victoria Azarenka, cayó eliminada en la cuarta ronda tras perder su partido ante la cabeza de serie número quince, la eslovaca Dominika Cubulkova (6-2 y 7-6). Cubulkova se medirá ahora a la ganadora del partido entre Samantha Stosur, finalista en 2010, y Sloane Stephens.