Vitoria. "Quiero jugar esta final porque es mía", admitía entre sollozos Yves Xala en rueda de prensa en Irun. Se le caían las lágrimas, se cortaban las palabras hundidas bajo un apendicitis en mal momento y una decisión demasiado severa, enmascarada en una resolución puramente deportiva, que atentaba contra el derecho del pelotari para disfrutar de su billete para la función estelar del año, que se disputará en el frontón Bizkaia de Bilbao. Entre el rumor salado del lagrimeo, se entrelazaban las opiniones de los médicos que le habían tratado en Baiona: Issadi y Claracq. El primero se aventuraba en adelantar que "nadie puede asegurar que no esté al nivel el 3 de julio. El que lo haga, miente". Las losas pesadas de la resolución habían hecho tocar fondo a un Yves que no había sido explorado por el doctor Pedro Otazua, clave en la decisión de la LEP. M, y iba a plantar cara en una batalla por defender su oportunidad en el Manomanista. El tiempo corría en su contra y las decisiones eran firmes.

Apenas 24 horas antes de la elección de material, donde ya echaba a andar el cuero para la final del Manomanista, apenas tres días antes del duelo, la Liga de Empresas decidió posponer de "manera excepcional" la batalla por la txapela del campeonato más importante del año. De este modo, Yves Xala ya tiene su final y cumple a rajatabla lo explicado a DNA. "Voy a jugarla", explicó a este periódico el pasado domingo y desde entonces se han precipitado los acontecimientos de un partido que estaba empapándose de una polémica demasiado espesa como para no haberle pasado factura. Y así ha sido y ha derivado en un aplazamiento tan necesario como necesario es que un manista que se ha ganado su derecho de disputarse la txapela ante Aimar Olaizola. Asimismo, esta resolución deja a Oinatz Bengoetxea fuera del duelo.

Desde que el Juez Único, Borja Osés, tomara la decisión de evitar la participación del pelotari lapurtarra en el partido cumbre de la temporada manista, el delantero lekuindarra ha estado peleando por obtener un hueco merecido y ayer desembocaron todos los esfuerzos del zurdo en una decisión que sepulta la tomada anteriormente por el ente manista, que días antes había ratificado y calificado como "irrevocable".

Los acontecimientos, tras la rueda de prensa de Yves Xala el pasado lunes en Irun en la que se colocó con la etiqueta de dudoso la razón médica admitida por la LEP. M el pasado 8 de junio, desde entonces tomaron un cariz amistoso, primero, y de ataque, después. Y es que, tal y como analizaba en dicha comparecencia el abogado del manista Jean-Paul Gibert, la primera fase iba a ser consensuada -buscaban una reunión con los representantes de la Liga de Empresas que le fue negada a Yves con el pretexto de que "primero debía solicitarla mediante un mail"- y la segunda iba a tener un aspecto más beligerante. De este modo, aunque Xala mostrara desde el inicio la búsqueda de un punto intermedio para encontrar una solución efectiva para satisfacer su derecho de jugar la final del Manomanista, la LEP. M no tuvo a bien reunirse el martes con el pelotari a pesar de que este cumpliera el requisito que pedía el ente de mostrar su interés primero con correo electrónico. No obstante, mientras Yves sufría ante la desesperación de no conocer aún el final de su situación, el propio martes, tal y como señalan a este periódico fuentes cercanas al manista, el letrado de Xala se reunión con un bufete de abogados reputado de Donostia, con los que estuvo buscando las posibles soluciones que existían al caso.

Asimismo, las mismas fuentes admiten que el bufete consultado por el letrado de Iparralde se iba a presentar ayer en los juzgados para denunciar la situación de Xala, dado que la hora límite para colocar la denuncia en el juzgado era la de las 00.00 horas de hoy.

Sin embargo, durante la mañana de ayer, Xala fue reclamado por la promotora eibarresa para reunirse. Tras la petición, el de Lekuine paralizó las gestiones de los letrados donostiarras a la espera de la conversación con la operadora de Eibar. En dicha comparecencia, celebrada a partir de las 14.00 horas de ayer, estuvieron únicamente el pelotari de Iparralde y un representante de Aspe aún por confirmar -aunque todo apunta a que fue el propio gestor de la empresa, Fernando Vidarte-.

Tras comparecer las dos partes cara a cara y sin intermediarios de por medio, la promotora de Eibar volvió a solicitar una reunión de la Liga de Empresas, en la que se replanteó la resolución tomada por el Juez Único a pesar de "considerar la resolución del día 8 de junio de 2011 suscrita por el Juez Único de Competición de la LEP. M ajustada plenamente a la reglamentación que resulta de aplicación". En dicha comparecencia, en la que estuvieron presentes todos los componentes del Consejo de Administración del ente manista, compuesto por representantes de las dos empresas y el Juez Único decidió "por unanimidad de sus miembros reunidos en régimen universal", deshaciendo la resolución tomada la pasada semana -cuentan desde Asegarce que en aquella ocasión se votó por todos los votantes el no aplazamiento-.

presión popular El pasado miércoles, desde Aspe admitían que "no podían asegurar la presencia del pelotari en la final el 3 de julio"; sin embargo, ayer declararon que los informes presentados por el manista aseguraban que iba a llegar a la nueva fecha marcada. Una incongruencia para asegurar una marcha atrás en la que mucho han tenido que ver las presiones externas que han recibido las promotoras: por un lado, desde la cátedra pelotazale, el ambiente estaba enrarecido y la mayoría de aficionados se había decantado por Xala e, incluso, se habían devuelto entradas para la final Olaizola II-Bengoetxea VI; los pelotaris, por otro, se habían movilizado en un comunicado en el que abogaban por defender "los méritos deportivos los que prevalezcan, por respeto a pelotaris, afición y en general a todos los que amamos este deporte", y, para terminar, la presión mediática.