Pamplona. Jesús Buldáin reflexiona antes de contestar a cada pregunta. Lo piensa todo. Como cuando aconseja a Abel Barriola. Y el domingo intentará repetir para que el leitzarra se cale la txapela.

¿Cómo llega Barriola?

Con una ilusión especial porque el año pasado estuvo con una lesión muy fuerte y volver a las canchas y llegar a la final le hace llegar con muchas ganas de ganar.

¿Ha regresado con una mayor fortaleza mental?

No lo sé, pero tener una lesión tan fuerte a uno le hace reflexionar y pienso que ha vuelto con más ganas que nunca porque sabe que ya tiene una edad, y como tiene muchas ganas de estar arriba y ganar txapelas, igual ha regresado más motivado.

La prueba es que ha hecho un campeonato impecable, con sólo una derrota ante Irujo.

Exactamente. Fue un partido que empezó muy bien para Barriola, con un 10-2 y un 15-10 a su favor, pero Irujo reaccionó de una forma sorprendente. Si no, el partido era de Barriola. Pero Irujo reaccionó y además le salió todo.

¿Han repasado aquel duelo?

Hemos hablado de eso y de todo lo que se puede hablar para llegar en las mejores condiciones a la final. Estoy muy satisfecho con el trabajo que estamos haciendo.

Dice su pupilo que, si juega mal, está seguro de que perderá.

Ya sabemos quién es Irujo. Para mí, en estos momentos es el mejor pelotari del cuadro profesional. Por eso, y tratándose de una final, Barriola tendrá que jugar el mejor partido del campeonato para ganar porque Irujo es un rival durísimo y muy eficiente.

¿Le puede pesar a Barriola haber perdido las últimas seis finales que ha disputado?

Lo positivo es que ha llegado a ellas. Hay que darse cuenta de que son muchos los pelotaris que empiezan los campeonatos y que sólo dos llegan a la final. Hay que mirarlo de forma positiva y pensar que llegar a la final ya es un éxito. Si ha perdido esas finales es porque le queda algo por aprender, pero está ahí, muy cerca de lograr txapelas y es un buen síntoma.

¿Qué partido espera?

Soy una persona que no espera nada. Me preparo para lo que pueda pasar. Me gusta prepararme para lo más difícil. Luego me relajo y salgo a la cancha e intento transmitir cosas a Abel. Sabemos que el partido puede ser duro, pero son probabilidades porque no sabemos cómo va a ser. Sin embargo, tenemos que estar preparados para lo que pueda pasar. Puede ser que empecemos con ventaja, con el marcador en contra... Hay que saber reaccionar en todos los momentos. Para mí, lo más importante en una final es estar preparado para cualquier adversidad y para ganar el partido.

¿Qué opinión tiene del Atano?

Es bueno para atacar, pero peor para defender. La pelota anda muchísimo en el suelo y es muy difícil defender. Pero también tiene la ventaja de que es bueno para atacar. Vamos a pensar que vamos a atacar y, si no, ya veremos. Nuestra intención es, de una forma u otra, ganar.

¿Va a ser fundamental el saque?

No creo que sea así. Pienso que fundamental es todo: sacar bien, defender bien... Hay que estar mentalizado para hacerlo todo bien.

Este ha sido su primer campeonato como botillero de Barriola. ¿Qué balance hace?

Tengo ganas de aprender. Encuentro diferencias entre ser botillero y ver la pelota desde casa. No tiene nada que ver. Eres responsable de lo que le dices y de lo que le transmites. Te das cuenta de que lo que dices surte efecto y lo que quieres es que sea un efecto positivo. Se trata de congeniar la responsabilidad entre lo que le dices y lo que hace.

¿Es Barriola un pelotari fácil de asesorar?

No es fácil asesorar a nadie porque son momentos tensos para los pelotaris. Barriola es competitivo y sólo le vale ganar. Por lo tanto, no es fácil aconsejarle, pero me veo muy capaz.

¿Cómo surgió la idea?

Él me dijo que quería una persona nueva. Abel es muy inteligente y siempre está pensando en aprender para ser mejor pelotari. Y al final cambiar es aprender. Estar con gente nueva te da opción de aprender cosas nuevas.