Madrid. El Real Madrid inicia un nuevo intento hacía la soñada décima Liga de Campeones con un especialista al mando como José Mourinho, campeón de Europa con Oporto e Inter de Milán, que arranca su travesía ante un equipo que cinco años después vuelve a la elite europea, el Ajax, con la baja de su gran estrella, el uruguayo Luis Suárez. La ilusión de conquistar la Décima en el estadio Santiago Bernabéu se esfumó la pasada temporada. La maldición de octavos que protagoniza un Real Madrid que no supera esa barrera en seis años, dejó un poso de enorme decepción y sentenció a Pellegrini. Ante el Lyon se derrumbaron las ilusiones y ahora, un proyecto liderado por Mourinho, comienza a reconstruirlas.

No ha hecho más que empezar la temporada y la previa del encuentros ante el Ajax llega marcada por el toque de atención de Cristiano a sus aficionados. Mourinho confía ante el Ajax en ir mejorando el aspecto ofensivo, ya que el defensivo está bajo control tras dos partidos ligueros en los que Iker Casillas no solo no encajó un solo gol sino que ni tuvo que intervenir ante un solo disparo.

Medita Mourinho repetir el equipo que consiguió el primer triunfo oficial de la temporada. La única duda por despejar está en la continuidad de Benzema partiendo del extremo derecho, o la entrada de Di María. Si en el Real Madrid son baja por lesión Raúl Albiol, Fernando Gago y Kaká, los planes del Ajax los trastoca Luis Suárez, sancionado, que es el encargado de asumir todo el peso ofensivo y materializar buena parte de los tantos del conjunto holandés. Tampoco podrá jugar en la defensa Vertonghen por sanción.

Xabi Alonso y De Jong se reencontrarán tras la patada del holandés en la final del Mundial.