Vitoria. La tradicional gala navideña de gimnasia acude un año más a su cita en el polideportivo de Mendizorroza para deleitar a los asistentes con los mejores representantes provinciales, nacionales e internacionales de la gimnasia actual. En esta ocasión, por encima de todos, la cita del próximo 19 de diciembre tendrá a la estrella ucraniana Anna Bessonova como el principal atractivo de una gala que celebrará su 16ª edición.

Bronce olímpico en Atenas 2004 y Beijing 2008, además de campeona del mundo en 2007 y tercera en el último torneo mundial celebrado en Japón, Bessonova es sin duda una de las mayores exponentes de la gimnasia rítmica internacional. O al menos lo era, pues la gimnasta nacida en Kiev afronta los últimos compases de su carrera y, de hecho, la gala que tendrá lugar en la capital alavesa será una de sus escasas apariciones públicas antes de su retirada oficial.

Sin embargo, aunque el talento y sobriedad de la ucraniana eclipsarán a buen seguro al resto de participantes, el polideportivo de Mendizorroza contará también con la presencia de otros atractivos para los espectadores que opten por abonar los cinco euros del precio de la entrada, si bien el pase será gratuito para los menores de 13 años. Si el pasado año fueron Ortzi Acosta y sus compañeros del Circo del Sol los encargados de aportar la nota colorista, esta vez serán los rusos Anastasia Gorbatyuk y Alexander Barleben los que trasladarán al pabellón vitoriano la espectacularidad de la gimnasia acrobática, modalidad en la que ambos son actualmente los campeones del mundo. Por si fuera poco, también estarán presentes varios miembros de la selección nacional de gimnasia artística masculina y femenina, así como la mayoría de representantes de los clubes alaveses en todas las categorías.

premio honorífico Pero, además de para hacer las delicias de los espectadores, la gala del próximo día 19 de diciembre servirá para homenajear a dos personas que, como bien apuntó ayer Antonio Estébanez, presidente de la Federación Alavesa, "han vivido toda su vida por y para la gimnasia". Una calificación que cumplen a la perfección tanto José Manuel Álvarez, Fibras, como Martín Rodríguez. El primero ha contribuído como pocos al auge de la gimnasia en el territorio alavés como profesor de diversas modalidades deportivas para los más pequeños hasta su retirada a los 70 años. Por su parte, Martín Rodríguez ha sido durante muchos años la cara visible de la halterofilia alavesa como entrenador del Udea.