Patxuko Nice, Joxe Ripiau, Marmoka... No es corta la lista de grupos con los que se han subido al escenario Sergio Ordoñez (Patxuko), Alex Terrones (Terri) e Ibai Larralde, aunque este martes acuden los tres por primera vez a la capital alavesa como Besarka, proyecto puesto en marcha en 2023 y que el año pasado publicó su primer EP, Beharrezkoa. La cita es en el Parral, como siempre en este espacio a partir de las 20.30 horas.

Primera vez en Vitoria, por lo menos con esta formación.

–Eso es. Hemos sacado un EP y tenemos varios conciertos seguidos ahora para rodar la banda. Además de tocar los tres temas que están en el trabajo, tocaremos algunas canciones nuevas, más algunos de los grupos anteriores en los que hemos estado.

Ya llevan en la música unos cuantos años, ¿pero con Besarka es como empezar de cero?

Siempre empiezas con la ilusión del primer proyecto. Pero es verdad que son muchos años rodando. Eso te sirve no solo para tener más experiencia grabando y ensayando, sino también para salir y tener ya muchos contactos a la hora de llamar a determinadas puertas. Yo, por ejemplo, muchas de las amistades que tengo hoy las he hecho a través de la música. En cierto modo sí que es como volver a empezar, como si fuéramos unos chavales de 18 años pero ya con un recorrido (risas).

La escena ha cambiado mucho a lo largo de los años. ¿Tras este primer EP se plantean un larga duración o eso ya no tiene recorrido?

–Cuando pusimos en marcha este proyecto barajamos las dos cosas, además porque teníamos varios temas para grabar. Pero es verdad que ha cambiado todo y, sobre todo en los últimos años, ha cambiado muy rápido. Antes se llevaba más lo de sacar un disco. Los que venimos de atrás, antes de la era digital y de las plataformas, tenemos más costumbre de comprar un disco con su carátula, las fotos, las letras, los agradecimientos. Es verdad que ahora se ha recuperado un poco el tema de los vinilos. Pero es cierto que a las nuevas generaciones no les importa tanto lo que hay detrás de una canción, lo que quieren es escucharla. No sé si haremos un larga duración. Seguramente lo que haremos ir sacando poco a poco cosas, como hacen otros grupos. Esto de la música va ahora demasiado rápido y a veces no sabes por dónde tirar.  

Besarka Cedida

Pop, reggae, ska...

Besarka es...

–Es un trío un poco curioso. Es verdad que cuando acabó Patxuko Nice, queríamos hacer algo más intimista con una formación al uso de batería, guitarra, bajo y voz. Cuando estaba en Joxe Ripiau, yo tocaba de pie las percusiones. Y aquí hemos montado un pequeño set de batería en el que toco de pie y como he aprendido a usar la tecnología para disparar una serie de cosas, jugamos con eso. Son herramientas modernas que nos sirven. Nosotros hacemos una propuesta muy variada. Desde el pop británico hasta el reggae, tenemos bastantes influencias que se unen aquí. La gente se va a encontrar con pop, reggae, algún ska muy suave... Igual el concierto empieza un poco más serio, para dar paso también a algún momento de psicodelia y terminar un poco más festivos. Lo que buscamos es que todo tenga un sentido en conjunto, una musicalidad y una razón. Es una mezcla de todo. Somos bastante melódicos, la verdad.

Con el EP ya en la mano, ¿2025 tiene que ser para tocar todo lo que se pueda, no?

–De momento, tenemos ya todo cerrado hasta julio. La gente nos está animando, además. La verdad es que al principio no teníamos muy claro si las actuaciones podían ser muy dinámicas por el formato que llevamos, pero hemos visto que sí. De hecho, estamos bastante animados viendo cómo están funcionando las cosas. Estamos teniendo suerte, además, porque a todos los sitios a los que hemos llamado y ya nos conocen de otros proyectos, como pasa con el Parral, la respuesta ha sido muy buena. Y en abril nos vamos a ir a Suiza para dar cinco conciertos, así que imagina. Estamos muy contentos con eso. Luego ya veremos cómo viene la cosa. Lo que queríamos era arrancar como vamos a hacer, darnos a conocer. Claro, igual lo que hacemos nosotros no es lo que se lleva ahora porque la gente joven quiere otras cosas. Pero sabemos que tenemos nuestro público. Sí, igual de 30 para arriba, pero bueno. Mi padre, cuando íbamos en el coche, me ponía a Juan Pardo y yo le decía: ¡vaya música que me pones! Pues supongo que ahora será igual (risas). Pero ya te digo que tenemos nuestro público y lo bonito es poder seguir tocando.